El exprimer ministro populista Andrej Babis y el exgeneral Petr Pavel se enfrentarán en la segunda y definitiva vuelta de las elecciones presidenciales checas. Ambos candidatos disputarán en dos semanas la presidencia del país europeo, según apunta el recuento con más del 80% del voto escrutado.
Babis, magnate de la industria agroalimentaria de 68 años, va en cabeza con el 36% de los apoyos. Le sigue el exgeneral Pavel, de 61, con el 34%. En tercer lugar se sitúa la economista Danuse Nerudova, única mujer entre los ocho candidatos a la jefatura del Estado, con el 14 %. La participación alcanzó el 68%, muy por encima del 61 % de hace cinco años.
Para obtener el cargo en esta primera vuelta se necesita una mayoría absoluta (más de la mitad de las papeletas) y ninguno de los candidatos ha obtenido este porcentaje. Por tanto, son estas dos listas más votadas las que alcanzarán la siguiente ronda. De los comicios saldrá el sustituto del actual jefe de Estado, el antiguo socialdemócrata Milos Zeman, cuyo segundo y último mandato de cinco años vence en marzo.
Zeman ha sido un presidente con numerosas polémicas por sus ataques a la prensa y por su cercanía con Rusia y China, aunque se alejó de Moscú después de la invasión rusa de Ucrania el pasado febrero. Unos 8,4 millones de checos estaban llamados a votar durante dos jornadas electorales, que se desarrollan entre este viernes y sábados, 13 y 14 de enero.
Pavel fue antiguo jefe de las Fuerzas Armadas y fue el primer general de Europa del Este en presidir el comité militar de la OTAN, el cargo militar más alto de la Alianza. El antiguo general ha abogado por la estabilidad y por su perfil institucional, su lema de campaña ha sido 'Devolvamos el orden y la tranquilidad a la República Checa', y ha abogado por seguir ayudando a Ucrania para defenderse de la agresión rusa y mantener la unidad europea frente a Moscú.
Sin ser su candidato oficial, Pavel ha recibido el apoyo de Spolu (Juntos) el principal socio de la coalición gubernamental de centro derecha, de la que también forma parte el progresista Partido Pirata. "En la segunda vuelta hay que mostrar el peligro que puede suponer Babis: populismo y deslizarnos fuera de la línea democrática y proeuropea", señaló Pavel en rueda de prensa tras comenzar el recuento.
Babis, por su parte, ha contado con el apoyo de su partido populista liberal ANO, el más importante de la oposición, y también con el del presidente saliente Zeman. El candidato presidencial fue absuelto el pasado martes por un delito de fraude con fondos comunitarios, lo que le ha dado impulso en la recta final de las elecciones.
Con todo, las encuestas prevén que Pavel venza en la segunda vuelta ya que la mayoría de los votantes de Nerudova y otros candidatos le apoyen frente a Babis, una figura muy polarizadora.
El presidente Zeman cuenta con inmunidad legal durante su mandato de cinco años, algo que beneficiará a Babis, que afronta otras investigaciones por fraude. El exprimer ministro cuenta con una base muy fiel de seguidores pero su principal problema en la segunda vuelta será atraer a los votantes de los demás candidatos.