La Unión Europea duplica su financiación para entregar armas de combate a Ucrania con 500 millones de euros extra procedentes del presupuesto comunitario, hasta alcanzar un total de 1.000 millones. Los jefes de Estado y de Gobierno de los 27 se han comprometido además a aumentar "de forma sustancial" el gasto militar en sus respectivos presupuestos nacionales como respuesta al "cambio tectónico" en la seguridad europea provocado por la guerra de Vladímir Putin contra Ucrania.
Estas decisiones se han adoptado durante la cumbre informal de líderes europeos celebrada en Versalles, en la que el presidente francés, Emmanuel Macron, el máximo defensor de la "soberanía estratégica" y de crear una auténtica Europa de la Defensa, ha ejercido de anfitrión en su calidad de presidente de turno.
Tras el estallido del conflicto en Ucrania, Alemania, Dinamarca y Suecia han sido los tres primeros Estados miembros en anunciar un aumento inmediato de su gasto en defensa hasta alcanzar el 2% del PIB. Este es el objetivo que ha marcado la OTAN, pero que pocos países europeos cumplen. España es el país que menos dinero dedica a sus políticas militar y de defensa (apenas un 1,02%), sólo por delante del Principado de Luxemburgo.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dicho que su objetivo es llegar en el año 2024 al 1,22% del PIB de gasto en defensa. A su juicio, la prioridad debe ser "acabar con la fragmentación de la base industrial de defensa en Europa y por tanto gastar mejor, invertir mejor, para crear sinergias que ahora mismo por desgracia no se están produciendo".
Aparte de los presupuestos nacionales de los Estados miembros, la UE acordó la semana pasada desbloquear 450 millones de euros del presupuesto comunitario para financiar la entrega de armamento letal a Ucrania con el fin de que pueda defenderse del ataque de Rusia. Es la primera vez en la historia que la UE paga la entrega de armas a un país extracomunitario. "Ha caído un tabú", dijo entonces el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.
Ha sido precisamente Borrell el que ha anunciado este viernes el acuerdo de los líderes europeos para duplicar esta cantidad. "Todo el mundo es completamente consciente de que tenemos que aumentar nuestro apoyo militar a Ucrania para continuar metiendo presión a Rusia. Así que 500 millones de euros más", ha anunciado el Alto Representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad Común.
El dinero saldrá del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz, un nuevo instrumento que se creó el año pasado. Su presupuesto global es de 5.000 millones de euros para el periodo 2021-2027. Hasta ahora nunca se había usado para financiar la entrega de armas de combate. Este dinero se suma al envío de armas sufragado con fondos nacionales que están realizando la mayoría de Estados miembros, entre ellos España.
Carencias estratégicas
"A la vista de los desafíos a los que nos enfrentamos y con el objetivo de proteger mejor a nuestros ciudadanos, debemos invertir de forma decidida más y mejor en capacidades de defensa y tecnologías innovadoras", reza la declaración de los líderes europeos aprobada en la cumbre de Versalles.
En concreto, los Veintisiete se comprometen a "aumentar de forma sustancial el gasto en defensa, con una cuota significativa para inversión, centrándose en las carencias estratégicas ya identificadas, y con capacidades de defesan desarrolladas de forma colaborativa dentro de la UE".
"Necesitamos financiar programas conjuntos de capacidades dirigidos particularmente a cubrir los dominios en los que podemos tener carencias, ya sea el transporte aéreo, los drones de combate, las capacidades de defensa y las misiones complejas", explican fuentes del Palacio del Elíseo.
Los líderes europeos aseguran además que mejorarán su preparación frente a los desafíos emergentes de "guerra híbrida". Se trata en particular de fortalecer la resiliencia en ciberseguridad, proteger las infraestructuras críticas y combatir la desinformación.
Finalmente, la UE se fija también como prioridad reforzar la dimensión de seguridad y defensa de las actividades e industrias espaciales, así como acelerar los esfuerzos para facilitar la movilidad militar por todo el territorio comunitario.
Los jefes de Estado y de Gobierno han pedido a la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, que elabore un análisis de las brechas de inversión en defensa en el continente. Un examen que se realizará en colaboración con la Agencia Europea del Armamento y cuyos resultados deben publicarse a mediados de mayo. Bruselas deberá proponer entonces cualquier iniciativa adicional necesaria para reforzar la base industrial y tecnológica de defensa en Europa.
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