La Unión Cristianodemócrata (CDU), primera fuerza de la oposición en Alemania, ha iniciado el proceso de expulsión del líder de su agrupación derechista Unión de Valores, Max Otte, a quien la ultraderecha ha propuesto como candidato a la presidencia del país.
Otte ha sido suspendido de militancia por la dirección del partido a la espera de que se consume su expulsión, un proceso que puede demorarse aún, mientras que la elección presidencial esta convocada para el 13 de febrero.
El propio afectado respondió este miércoles a esa decisión dando por interrumpidas todas sus actividades al frente de la Unión de Valores -o "Werte Unión"-, una agrupación vinculada al ala más derechista de la CDU.
"Por respeto al cargo presidencial, dejo en suspenso todas mis actividades políticas en la Unión de Valores hasta después de la elección", indicó Otte en un comunicado difundido por esa agrupación.
La candidatura de Otte, respaldado por la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), se considera un desafío para la CDU, que no ha presentado a un candidato propio, sino que respalda la reelección de Frank-Walter Steinmeier.
El actual presidente accedió al puesto en 2017 como candidato de consenso entre el bloque conservador de la entonces canciller Angela Merkel y los socialdemócratas, su partido originario, aunque formalmente al asumir el cargo dejó su militancia.
Ahora cuenta de nuevo con el apoyo explícito de la CDU y del tripartito del canciller Olaf Scholz entre socialdemócratas, verdes y liberales.
La elección corresponde a la Asamblea Federal, integrada por los diputados del Bundestag (Cámara baja) y el mismo número de miembros designados por el Bundesrat (Cámara alta), que se reúne regularmente cada cinco años para elegir al presidente.
La propuesta de la AfD a favor de Otte ha sacudido a la CDU, que el fin de semana pasado eligió a Friedrich Merz como nuevo jefe del partido, quien recibió más del 94% de los votos en un congreso virtual.
Otte ha representado desde hace años las críticas más duras contra el centrismo de Merkel. Al aceptar la propuesta de la AfD afirmó que no la veía incompatible con su pertenencia a la CDU y argumentó que el cargo está formalmente por encima de la afiliación partidaria.
Su candidatura fue presentada por el copresidente de la AfD, Tino Chrupalla, y aprobada por la cúpula del partido ultraderechista por 6 votos a favor, 2 en contra y 2 abstenciones.
La AfD tiene 152 delegados del total de 1.472 que integrarán la Asamblea Federal.
Otte será el tercer aspirante al puesto, junto Steinmeier y el candidato de la opositora La Izquierda, Gerhard Trabert, quien concurre de forma simbólica y sin perspectivas de prosperar.