Ya son seis personas muertas por la decena de incendios que devastan el sur y oeste de Turquía, después de que las autoridades turcas confirmaran este sábado la muerte de dos bomberos que quedaron atrapados este viernes en su camión cisterna en la provincia meridional de Antalyaen.
Además, se ha declarado este sábado el estado de desastre en las regiones del país afectadas. "Hemos declarado nuestras regiones afectadas por los incendios forestales como zonas de desastre", ha anunciado este sábado el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, a través de su cuenta en la red social Twitter.
El jefe del Ejecutivo turco ha asegurado en el mensaje publicado en la red social que las autoridades competentes "seguirán adoptando todas las medidas para sacar las heridas de la nación y compensar las pérdidas".
Las llamas atraparon este viernes por la tarde un camión de bomberos con cuatro trabajadores en el municipio de Manavgat, donde desde el miércoles se expande un incendio que ha destruido grandes extensiones de bosques y terrenos agrícolas.
Dos bomberos no lograron salir del vehículo, mientras que otros dos consiguieron salir y resultaron heridos, y siguen a día de hoy ingresados en el hospital, aunque se prevé que serán dados de alta en breve, según informa el diario turco Hürriyet.
Los cuerpos sin vida de los dos bomberos atrapados fueron encontrados este sábado en el vehículo, con lo que sube a seis el número de víctimas mortales en Turquía, cinco de ellas registradas en Manavgat, según un recuento de la agencia turca Anadolu.
Los incendios afectan toda la costa mediterránea de Turquía, desde Hatay en la frontera siria hasta las provincias costeras del mar Egeo, con focos en las zonas turísticas de Marmaris y Bodrum.
Las altas temperaturas en el Mediterráneo oriental, que se acercan a los 40 grados en el sur de Turquía y que continuarán o incluso subirán en los próximos días, facilitan la expansión de los incendios.
Causas
Erdogan ha insinuado este sábado en un discurso televisado que el alto número de incendios son debidos a actos de "terrorismo". "Desde que el año pasado, los dirigentes de la organización terrorista dieran instrucciones de quemar los bosques, los incendios en Turquía se han duplicado", dijo el mandatario en una alocución, transmitida en directo en la cadena NTV.
Erdogan subrayó que hay un detenido en relación con el centenar de incendios que se registran desde el miércoles en una decena de provincias a lo largo de la costa mediterránea y la egea, pero no ofreció detalles sobre su identidad o supuestos motivos. "Es nuestro deber encontrar a quienes queman nuestros bosques y hacerlos sufrir", agregó.
Desde hace días, varios diarios ultranacionalistas especulan con la posibilidad de que los focos se deban a actos de sabotaje y atribuyen a Murat Karayilan, dirigente de proscrito Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK), la guerrilla kurda, un llamamiento a usar los incendios como arma política.
El ministro de Agricultura turco, Bekir Pekdemirli, aseguró este viernes que hay una investigación en curso sobre las causas y que "habrá una declaración cuando descubramos daños importantes". Al tiempo, pidió a la población que no extienda información "sin corroborar" en las redes sociales.
La oposición ha reprochado al Gobierno la falta de medidas preventivas y la escasez de aviones cisterna, suplida en parte por aeronaves de Rusia y Ucrania que ayudan en las labores de extinción.