Miles de estadounidenses salieron de nuevo a las calles de las principales ciudades del país en protesta por la elección de Donald Trump como nuevo presidente, mientras que el magnate acusó a los medios de comunicación de instigar las marchas.
Los manifestantes cortaron calles y autopistas en Nueva York, Washington, Los Ángeles y Oakland (California), Dallas y Austin (Texas), Baltimore (Maryland), Minneapolis (Minesota), Filadelfia (Pensilvania), Portland (Oregón), Salt Lake City (Utah) y también en Vancouver (Candá).
Se trata de la segunda noche de manifestaciones del movimiento "not my president" ("no mi presidente"), que rechaza el resultado electoral del martes.
"Acabamos de tener una elección presidencial muy transparente y exitosa. Ahora manifestantes profesionales, incitados por los medios, están protestando. ¡Muy injusto!", dijo Trump a través de su cuenta de Twitter.
La manifestación de Portland fue una de las más numerosas del país y adquirió tonos violentos cuando encapuchados ocasionaron destrozos a vehículos y comercios.
La Policía de Portland informó del lanzamiento de "proyectiles" contra los agentes, culparon a "grupos anarquistas" y según medios locales utilizaron gases lacrimógenos y efectuaron numerosas detenciones.
También se informó de tres detenciones en la protesta de Dallas y otras dos en Baltimore.