La abogada y activista trans mexicana Samantha Gomes Fonseca, de 37 años, fue brutalmente asesinada el pasado domingo 14 de enero en plena calle después de visitar a su pareja en el Reclusorio Sur en Xochimilco, un barrio obrero al sur de Ciudad de México. Dos días después del crimen, han salido a la luz los primeros vídeos que revelan los escalofriantes detalles.
En uno de los vídeos, se ve cómo la activista, que también fue precandidata al Senado por el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), sube a un vehículo de color gris que había pedido a través de la aplicación Didi. Tras recorrer unos pocos metros, a la altura de una parada de autobús, un individuo armado se aproximó, extrajo un arma de fuego y disparó a quemarropa.
En otra de las grabaciones, se observa cómo el agresor aguarda pacientemente la salida de la abogada sentado en una parada de autobús, actuando con total naturalidad y ocultando un arma de fuego bajo una manta blanca en su mano.
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Cuando el automóvil se acercó al lugar, en un punto donde había un badén, el agresor desenfundó el arma y disparó hasta en nueve ocasiones al asiento trasero, donde se encontraba la activista. En la grabación, se aprecia cómo el vehículo sigue su curso mientras el agresor huye corriendo entre una fila de automóviles estacionados detrás de él.
Inicialmente, el conductor pensó que se trataba de fuegos artificiales y continuó su trayecto hasta que la activista solicitó ser llevada a un hospital cercano. Sin embargo, a pocos metros, Gomes Fonseca perdió la vida.
En el momento del ataque, también viajaba un joven de 17 años, según informó el medio mexicano El Universal, quien mencionó en una primera declaración que Gomes Fonseca había sido amenazada por grupos criminales que controlan las cárceles locales.
Posteriormente, la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México reveló que la mujer había sido amenazada previamente debido a sus actividades con los reclusos en la capital. Según el mismo medio mexicano, Gomes Fonseca organizaba eventos diversos dentro de las cárceles, como concursos de belleza, baile, poesía y pintura.
Una oleada de crímenes
Este trágico asesinato es el cuarto de una persona trans en la primera quincena del año 2024. La oleada de crímenes tránsfobos ha desencadenado numerosas protestas en la capital. Durante la jornada del lunes, diversas agrupaciones LGTBI protestaron frente al Palacio Nacional de México, donde reside el presidente Andrés Manuel López Obrador.
La crispación se ha acentuado, además, por las declaraciones del presidente mexicano durante la semana pasada, cuando se refirió a una diputada trans de su partido como "un señor vestido de mujer". Aunque posteriormente pidió disculpas y reconoció el derecho a la identidad de género.
A pesar de que al menos 20 de los 32 estados que conforman México han promulgado leyes sobre la identidad de género, según un informe del Observatorio Nacional de Crímenes de Odio LGTBI de la Fundación Arcoíris, el país ocupa el segundo lugar en América Latina en cuanto a casos de violencia por homofobia y transfobia, siendo únicamente superado por Brasil.
Entre octubre de 2022 y septiembre de 2023, el país norteamericano registró 52 casos de asesinatos de personas trans y de género diverso, cifra que solo se sitúa por debajo de los 100 casos reportados en Brasil.