El Informe Mundial sobre la Cocaína 2023 publicado por la ONU el pasado jueves tasa en un 35% el aumento de la producción de cocaína a nivel global entre 2020 y 2021. Esto supone unos "niveles récord" que duplican las cifras de 2014, refleja el documento.
El estudio, elaborado por la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito, sostiene que existen más de 300.000 hectáreas de plantaciones, la mayoría en Colombia, seguida de Perú y Bolivia. Los tres países sudamericanos produjeron 2.000 toneladas, que fueron exportadas a Europa y el resto del continente americano.
Este máximo histórico en la producción de cocaína se debe en parte a la expansión del cultivo de arbusto de coca, así como a las mejoras en el proceso de transformación en cocaína. Esa producción es de la máxima pureza, por lo que la cifra que llega al mercado es mucho mayor en casos donde los narcotraficantes mezclan la droga con otras sustancias para aumentar sus beneficios.
Además, el consumidor está respondiendo positivamente a esta mayor oferta, y la demanda de la sustancia está también en aumento.
Nuevas rutas en el continente americano
Las rutas siguen siendo las tradicionales en el tráfico a Norteamérica, y permanecen dominadas por Colombia. Sin embargo, han evolucionado los traslados a otras regiones.
La cocaína que llega al Cono Sur procede cada vez más de Bolivia y Perú a través de Paraguay en avioneta y por la hidrovía Paraná-Paraguay, según el diario boliviano El Deber.
En cuanto a la exportación a Europa, la importancia de Colombia está disminuyendo a favor de otros puertos centro y sudamericanos. Los narcos han diversificado sus rutas en Centroamérica.
Aunque los mercados tradicionales de esta droga, América del Norte y Europa, siguen siendo los más importantes, la enorme producción puede permitir una expansión hacia África y Asia. "El potencial de expansión del mercado de cocaína en África y Asia es una realidad peligrosa", declaró en un comunicado la directora de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), Ghada Waly, que consideró que "el aumento de la oferta mundial de cocaína debería ponernos a todos en alerta máxima".
La recepción de alijos al otro lado del charco
Los grandes puertos del mar del Norte, como Amberes, Róterdam y Hamburgo, han sustituido a España y Portugal como los lugares más frecuentes de entrada de la cocaína a Europa Occidental. Sólo en Amberes se incautaron en 2021 casi 90 toneladas de cocaína, mientras que en Róterdam fueron más de 70 toneladas.
Los narcotraficantes tratan de introducir grandes cantidades de droga en contenedores aprovechando la enorme actividad comercial en estos puertos.
Además, algunas regiones como África Occidental y Central, así como el sureste de Europa, son cada vez más importantes como zonas clave de tránsito de la droga.
No obstante, las incautaciones de cocaína por parte de las fuerzas de seguridad de todo el mundo también han aumentado considerablemente, y alcanzaron la cifra récord de casi 2.000 toneladas en 2021. De hecho, esos decomisos aumentaron a mayor velocidad que la producción, lo que significa que ha contenido el crecimiento de la cocaína disponible para el consumo.
Más grupos criminales
El Informe Mundial sobre la Cocaína 2023 señala que el panorama delictivo se está fragmentando y cada vez hay más grupos criminales implicados en el negocio.
[Hallan 2.600 kg de cocaína en un submarino y tres semisumergibles de las disidencias de las FARC]
La desmovilización en Colombia de las FARC, que hasta entonces controlaban muchas de las regiones cocaleras del país, abrió el camino a otros grupos, tanto locales como extranjeros, sobre todo de México y de los Balcanes. Sin embargo, sigue aumentando el número de exguerrilleros de las FARC colombianas que se involucran en el tráfico ilegal.
En Brasil el crimen organizado parece apuntar cada vez más a países africanos de habla portuguesa, como Mozambique, Angola y Cabo Verde.
Además, el informe revela que han proliferado los llamados "proveedores de servicios", es decir, grupos especializados que prestan sus servicios en toda la cadena de suministro a cambio de un pago o una comisión.
"Estos grupos van desde bandas de motoristas en Bélgica hasta grupos de delincuencia organizada bien conectados en Guatemala. Los expertos creen que esta práctica está extendida por América Central y del Sur, el Caribe y África", indica el informe.
Los expertos exponen que cuando las rutas y métodos de contrabando convergen los mismos grupos pueden implicarse en diversas actividades delictivas.