Pedro Castillo alega que dio el autogolpe bajo el efecto de la sedación pero no se hará el test antidroga

Han pasado 18 meses desde aquello. Ahora Castillo está en la cárcel, acusado de rebelión, y es protagonista en las grandes revueltas de su país. El otrora presidente ordenó esta misma semana el cierre del Congreso, la reorganización del sistema judicial y la instalación de un ejecutivo de emergencia que iba a gobernar él por decreto, ante la moción de censura que le iban a plantear.

Muchos no se explican por qué lo hizo. Cierto es que le habían presentado una moción de censura, pero había que ver antes si prosperaba o no. En la calle, aún hay quien le apoya. Algunos piensan, incluso, que le drograron.

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El abogado del expresidente detenido, Guillermo Olivera, afirmó que "estaba un poco sedado" cuando leyó los mensajes con las órdenes. "Cuando leyó el mensaje escrito por otros unos minutos antes le dieron una bebida, una supuesta agua. Y después de bebarla se sitió como atontado".

No era el único que trataba de exculparle. Guido Bellido, primer jefe de gabinete de Castillo, aseguró que "el presidente no recuerda". Apuntaba que se lo había dicho con sus propias palabras. 

PEDRO CASTILLO

"El estado psicológico de Castillo al leer el mensaje a la nación evidencia de que no se encontraba dentro de sus facultades, ello hace presumir que pudo haber sido inducido, urge una prueba toxicológica y el Ministerio Público debe acceder a las cámaras de seguridad de palacio", había escrito previamente en Twitter.

Bellido, que renunció a su puesto en Perú Libre, el partido con el que se alzó presidente Castillo, expuso la extrañeza del caso. "Es raro que un presidente, que no iba a ser destituido por falta de votos, termine dando los argumentos para su destitución".

También se sumó a su defensa Guillermo Bermejo Rojas. El diputado peruano visitó a Castillo a la prisión y expuso que le había dado autorización para difundir una carta que el propio expresidente había firmado de su puño y letra. En la misma, aseguraba que "un grupo de médicos camuflados y una fiscal sin rostro me obligaron a sacarme una muestra sin mi consentimiento" el sábado por la tarde.

La supuesta carta de Castillo, además, asegura que en la mañana de este domingo volvieron a visitarle y que él se negó "por seguridad y mi integridad". En la supuesta carta de Castillo se aduce: "No descarto que este plan maquiavélico esté dirigido por la señora fiscal de la nación, el presidente del Congreso y la señora Dina Boluarte", actual presidenta de la república.

"Perú está contigo"

Castillo se encuentra en prisión preventiva en el penal de Barbadillo, al este de Lima. Fue condenado a siete días de privación de libertad para evitar su huida y recoger pruebas sobre lo ocurrido. Cabe recordar que Castillo ya había intentado escaparse tras el 'autogolpe' de estado: trató de llegar a la embajada de México para pedir asilo. Nunca lo hizo.

El presidente del Instituto de Medicina Legal, Francisco Brizuela, declaró en RPP Noticias, que Castillo se negó "a pasar la pericial psicológica y psiquiátrica". Brizuela, además, negó que hubieran ido médicos a visitar a Castillo de manera anónima y bajo un plan maquiavélico.

Brizuela explicó que los médicos iban plenamente identificados y acompañados por un representante del Ministerio Público. Sin embargo, desde el primer momento, el expresidente se ha negado a que se le tomen muestras de sangre y de orina. Con ella se podría dilucidar si ciertamente hubo alguien que le drogó.

Protestas en Perú a favor del expresidente Pedro Castillo. Efe

Castillo estará en prisión, como mínimo, hasta el próximo miércoles. El Ministerio Público ha interrogado a los integrantes de su último gabinete de ministros para saber quién conocía el plan del expresidente, si es que lo hubiera. Estos lo han negado todo, dejándolo todo en la ex primera ministra Berssy Chávez y su asesor y predecesor, Aníbal Torres.

El propio Torres ha anunciado en las redes sociales su huida. Asegura que la Fiscalía lo investiga por formar parte de una organización criminal y por rebelión. Su defensa: que él sólo se limitó a escuchar el mensaje del presidente. "Paso a la clandestinidad".

Mientras tanto, las calles de Perú han sido tomadas por manifestantes de izquierdas. Piden la liberación del mandatario. Un millar de personas en Perú proclamaron el pasado jueves: "¡Pedro Castillo, Perú está contigo!" y "¡Si no hay liberación, habrá revolución!".

El maestro campesino

"Este gobierno ha llegado para gobernar con el pueblo y para construir desde abajo. Es la primera vez que nuestro país será gobernado por un campesino. Yo también soy hijo de este país fundado sobre el sudor de mis antepasados". Fueron las primeras palabras de Pedro Castillo como presidente. 

Era la primera vez que un político peruano alcanzaba cotas tan altas de poder a pesar de tener unas raíces tan humildes. El maestro iba contra el poder establecido, estaba rompiendo todos los cánones en una sociedad fracturada y donde había calado la polarización. Sin embargo, terminó donde sus predecesores: en la cárcel.

El expresidente de Perú, Pedro Castillo, en el momento de su detención Efe

Su sombrero de palma y su lápiz fueron un símbolo. Muchos le apodaban como 'Sombrero Luminoso'. Representaba a los campesinos y a la educación como forma de progreso. En realidad, fue todo lo que le llevó a doblegar a Keiko Fujimori. De hecho, sus discursos terminaban en multitud de ocasiones con una frase clave: "Palabra de maestro". 

Se le comparaba con Evo Morales o Rafael Correa, pero en un año y medio no le dio para lograr sus objetivos. Se le acusó de corrupción en varias ocasiones y tuvo hasta cinco gabinetes, con decenas de renuncias y destituciones. 

Ni siquiera pudo mantener sus alianzas. Las desavenencias con Vladimir Cerrón, líder de Perú Libre se hicieron patentes desde el principio. Este 7 de diciembre, el legislativo le cesó y Dina Boluarte ascendió al cargo como la primera presidenta de Perú. Ella es la sexta máxima mandataria del país en cuatro años.