La polémica está servida en Rusia. Más de 70.000 personas han firmado una petición para exigir la apertura de una investigación contra la conductora que arrojó a la intemperie al gato de un pasajero que viajaba en un tren. Los hechos ocurrieron el pasado 11 de enero cerca de la ciudad de Kirov. Al parecer, Twix, el gato de un ciudadano de 25 años residente en San Petersburgo, se escapó de su jaula y comenzó a correr por el interior de los vagones.
Ante la alerta del resto de los pasajeros, la conductora del tren interceptó al animal y acabó arrojándolo a la intemperie, en plena ola de frío. En el momento de los hechos, la ciudad de Kirov, donde ocurrió el suceso, registraba temperaturas de -30ºC. En las redes sociales han circulado durante estos días varios vídeos en los que se puede ver cómo la trabajadora se asoma por uno de los accesos al tren y arroja al felino a la nieve.
En un primer momento, el objetivo se centró en localizar al gato. Decenas de personas salieron a la calle para tratar de averiguar el paradero de Twix. Y es que la colaboración llegó hasta el punto de que se ofrecieron recompensas del equivalente a unos 300 euros para la persona que localizara al gato. El padre de Edgar, el dueño del gato, era quien viajaba en el tren y controlaba que el animal no saliera de la jaula. Sin embargo, por causas que se desconoce, el gato consiguió salir al exterior y escapó por los pasillos.
Ahora, en Rusia todo el mundo habla de la polémica en torno a Twix. Una conocida activista, Olga Kudryashova, fue la encargada de liderar la búsqueda. Ella misma fue la responsable, durante varios días, de moderar los canales que se crearon en redes sociales para tratar de localizar al animal.
"Es sencillamente incomprensible cómo alguien puede tirar al gato del tren. El asistente sabía perfectamente que estaban transportando un gato, y esto es algo muy cruel para un animal. Es invierno, hace mucho frío y arrojaron al gato del tren", explicó la joven que lideró la búsqueda tras lo ocurrido.
Días después, se ha confirmado la noticia. Twix fue hallado muerto, congelado y con varias mordeduras en su cuerpo. Al parecer, murió como consecuencia del frío y del ataque de otro animal. Ahora, tras lo ocurrido, miles de personas han recogido firmas para abrir un expediente y despedir a la conductora de la empresa estatal de transportes para la que trabaja.
Al parecer, el motivo por el que la conductora arrojó al gato a la nieve fue por confundirlo con un felino callejero. La empresa estatal de transportes ha lamentado la muerte de Twix y ha trasladado sus condolencias a los dueños de los gatos.
Imagen del gato Twix.
Los funcionarios rusos han respaldado la decisión de la trabajadora. Y es que, tal y como han detallado, la mujer "actuó de acuerdo con las normas". El dueño del gato había comprado el correspondiente billete para el animal. Sin embargo, este debía estar en todo momento en el interior de la jaula.
Así lo han trasladado, además, los abogados de la trabajadora, que también se han manifestado al respecto. "Aquí no puede haber un caso penal porque no hay intención. No hay arbitrariedad. La azafata del tren no se excedió en su autoridad. Al contrario, debe mantener el orden en el vagón del tren", ha confesado.
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El caso ha saltado también al ámbito de la política. Cuando todavía se desconocía el destino final del gato, el diputado pro-Putin, Vladimir Burmatov, se manifestó al respecto y trasladó su apoyo al dueño del animal.
"Por supuesto, necesitamos descubrir el destino del gato. Dios no lo quiera, esto termina en una tragedia para el animal, ya sea problemas de salud o muerte, entonces esto puede calificarse como trato cruel", dijo en ese momento. De hecho, su apoyo ha llegado hasta el punto de confirmar que lo ocurrido con la trabajadora podría ser un "homicidio intencional".
La polémica ha surgido también como consecuencia de las declaraciones del político. Y es que han sido muchos los que han tachado de "irónico" el hecho de que los gobernantes rusos condenen este tipo de actos al mismo tiempo que están inmersos en plena guerra con Ucrania.
En las últimas horas, la empresa estatal de transportes se ha manifestado de nuevo y ha emitido un comunicado en el que ha resaltado que los empleados "tratan a los animales con gran atención y amor, y los cuidan de todas las formas posibles durante el viaje". Además, como compensación tras lo ocurrido, la entidad ha barajado la posibilidad de firmar futuras colaboraciones con organizaciones que ayudan a los animales callejeros en Rusia.