Nueva Zelanda se ha convertido en el centro de críticas al conocer el estreno de un concurso en el que pagaban hasta 150 dólares, unos 138 euros, al menor de 14 años que más gatos cazase y matase antes de junio de 2023.
En Nueva Zelanda, los gatos salvajes son considerados como una plaga. Incluso en 2018, un pueblo neozelandés pretendía prohibir gatos para proteger el medio ambiente. Ahora, una nueva polémica azota al país: este concurso.
El torneo de caza de North Canterbury, situado en el noreste de la Isla Sur, consistía en premiar con dinero al niño que consiguiera matar a más gatos. El fin era recaudar fondos para una escuela local, según afirmaron los organizadores.
Cuando se extendió la noticia, se vieron obligados a cancelarlo debido a la multitud de amenazas y críticas que recibieron y así evitar "más reacciones violentas": "Desafortunadamente, se han enviado algunos correos electrónicos y mensajes viles e inapropiados a la escuela y a otras personas involucradas. Estamos increíblemente decepcionados con esta reacción", explicaron en las redes sociales.
También la cancelación viene después de una denuncia de la muerte de un gato salvaje que fue herido por un rifle de aire comprimido.
El concurso continúa con otras categorías para mayores de edad, como cazar ciervos y jabalíes.