La Administración Biden se inclina ahora por enviar un importante número de tanques Abrams M1 a Ucrania y el anuncio de su entrega podría producirse esta misma semana, según han indicado fuentes oficiales al diario The Wall Street Journal.
El anuncio formará parte de un entendimiento diplomático con Alemania en el que Berlín estaría de acuerdo en enviar un número menor de sus tanques Leopard 2 y aprobaría también que Polonia y otros países entregaran tanques de fabricación alemana. Esta nueva posición resolvería el desacuerdo trans-Atlántico que se ha producido en torno a los tanques y que ha amenazado con abrir fisuras en el bloque Occidental ahora que está a punto de cumplirse un año del estallido de la guerra.
El cambio de postura de EEUU se produce después de una llamada que tuvo lugar el 17 de enero entre el presidente Biden y el canciller alemán Olaf Scholz en la que Biden se comprometió a buscar la forma de proporcionar los tanques Abrams a pesar del criterio en contra del Pentágono. Un alto funcionario alemán ha señalado al citado medio estadounidense que el tema ha sido objeto de intensas negociaciones entre Washington y Berlín durante más de una semana y ahora parece que va camino de resolverse.
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Desde la Casa Blanca no han querido hacer declaraciones, aunque la agencia Reuters también apunta a esta posibilidad tras recibir la misma información que el diario The Wall Street Journal que ha sido filtrada por dos funcionarios estadounidenses. En el Pentágono, al igual que en la Casa Blanca, tampoco ha querido hacer declaraciones.
El canciller alemán, Olaf Scholz, señaló este lunes que toda decisión respecto a los envíos de armas debe ser adoptada "en estrecho consenso con nuestros aliados", tanto europeos como con Estados Unidos.
Michael McCaul, presidente republicano del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, señaló este fin de semana que enviar un número simbólico de tanques Abrams a Kiev sería "suficiente" para apremiar a sus socios, "especialmente Alemania", a desbloquear la situación y que también suministraran sus propios carros de combate.
Ucrania ha señalado en varias ocasiones que necesita los tanques occidentales porque eso daría a sus tropas mayor movilidad y protección frente a la próxima ofensiva rusa, que desde Kiev consideran que es inminente. Estos carros blindados también ayudarían a las Fuerzas ucranianas a retomar algunos de los territorios que han caído en manos de Rusia.
Los funcionarios estadounidenses señalan que los tanques Abrams son difíciles de mantener y que también es complicado entrenar a los ucranianos para que aprendan a conducirlos y a utilizarlos. Además, estos carros blindados utilizan combustible para aviones, por lo que desde el Pentágono consideran que no es una buena opción para esta fase de la guerra.