Uno de los vehículos más icónicos de la monarquía británica ha acabado en manos privadas tras una subasta. El Ford Escort que utilizó Diana de Gales, que falleció hace 25 años tras un accidente en un túnel de París, ha sido vendido por 650.000 libras (766.351 euros). Un coche que 'Lady Di' condujo entre 1985 y 1988. Y que utilizó para acudir a las exclusivas boutiques de Chelsea y Kensington, en Londres.
La casa de subastadas Silverstone Auctions es la que ha gestionado la operación, por la cual el coche ha acabado en manos de un comprador del condado de Cheshire. Según explicó el organizador de la subasta, Jonathan Humbert, el histórico vehículo de Diana de Gales se convirtió en el que mayor cantidad de ofertas telefónicas había generado en los últimos 12 años.
Las pujas comenzaron por las 100.000 libras. Pero rápidamente el precio comenzó a subir. Sobre todo, gracias al interés de compradores radicados en Dubái o en Coventry. El momento clave fue cuando el coche llegó a las 450.000 libras. A ese punto solo llegaron los interesados de Dubái y Cheshire. Finalmente, ganó el comprador de Reino Unido. Por lo que el coche no saldrá de las islas británicas.
El propio encargado de conducir la subasta ha admitido a la BBC su sorpresa cuando las ofertas llegaron a las 500.000 libras. Sobre todo, por un modelo de coche tan modesto como el Ford Escort. "Nunca había visto eso antes", apuntó Humbert, que sí había resaltado durante el evento que el coche formaba parte de la historia de Reino Unido.
Ese coche se convirtió en un icono después de que Diana Spencer decidiera conducir por su cuenta en lugar de que lo hiciera un miembro del Comando de Protección Real. La imagen de Lady Di al volante por las zonas de las boutiques había sido inédita hasta el momento. La anécdota fue que ese agente de la Guardia Real tuvo que sentarse en el asiento del copiloto para poder cumplir su cometido de proteger a la entonces princesa de Gales.
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El modelo del coche que conducía Diana también fue el único que se fabricó, después de un acuerdo entre Ford y el grupo de élite de protección de la familia real, conocido como SO14. Su mayor rasgo distintivo es el color negro, ya que en esos años los Ford Escort solían ser blancos. Aunque no fue el único coche de esa marca que tuvo la princesa. En junio de 2021, otro que utilizó se subastó por 52.000 libras.
La subasta se cerró finalmente por 730.000 libras, ya que al precio final había que sumar la prima que debe aportar el comprador. Una cantidad que ha sorprendido en la casa de subastas encargada del coche. Pero que aseguran que puede llegar a entender por la singularidad del vehículo y el "vínculo emocional" de Diana de Gales con la población británica.
De hecho, como recuerdan, llegó a conocerse como "el coche deportivo del pueblo". El único motivo para esa denominación es que lo conducía alguien tan querido como Lady Di.