El escándalo desatado por un vídeo grabado en Ibiza que compromete seriamente por corrupción al vicecanciller de Austria y líder del partido ultranacionalista, Heinz-Christian Strache, ha causado un terremoto político en la república alpina a una semana de las elecciones al Parlamento Europeo. Strache ha dimitido tras reunirse con el canciller federal y líder del conservador Partido Popular (ÖVP), Sebastian Kurz, a las 11.00 horas en la sede del Gobierno.
Ha anunciado su dimisión al cargo y a la jefatura de su Partido Liberal (FPÖ), tal y como pidió ayer la oposición en bloque, y muchos vaticinan incluso la ruptura de la coalición ÖVP-FPÖ que subió al poder a fines de 2017, y, en consecuencia, elecciones anticipadas.
Después de haber convocado el viernes una reunión de emergencia de su equipo que duró hasta altas horas de la noche, se espera que Kurz comparezca ante la prensa a primera hora de la tarde, indica APA.
El escándalo se desató en la tarde de ayer, cuando dos medios alemanes publicaron un vídeo en el que Strache y el jefe del grupo parlamentario del FPÖ, Johann Gudenus, se muestran dispuestos a compensar con contratos y favores a supuestos oligarcas rusos a cambio de ayudas a su campaña electoral.
"Una trampa, un vídeo, un daño total: la carrera política de Heinz-Christian Strache terminó abruptamente el viernes por la noche. La coalición turquesa-azul (ÖVP-FPÖ) ha fracasado", titula el prestigioso semanario vienés Profil, que cita fuentes del partido del canciller.
La filmación, publicada por el semanario Der Spiegel y el diario Süddeutsche Zeigung, fue grabada con cámara oculta durante una reunión en una villa de Ibiza (archipiélago español de Baleares) en el verano de 2017, pocos meses antes de las elecciones legislativas celebradas en octubre del mismo año.
Strache y Gudenus aparecen hablando con una mujer que se hizo pasar como sobrina de un oligarca ruso y afirma que quiere invertir unos 250 millones de euros en Austria, dejando claro que se trata de dinero negro.
El jefe del FPÖ le promete, como contrapartida a una eventual ayuda financiera a su campaña electoral, futuros contratos estatales en caso de que su partido, entonces opositor, pase a formar parte del gobierno.
Con respecto al dinero negro, le explica que debe entregarlo a una asociación para no tener que informar de la donación al Tribunal de Cuentas, como estipula la ley de financiación de partidos.
Ya anoche, el portavoz de la citada corte, Christian Neuwirth, reaccionó anunciando en un tuit que exigirá "explicaciones al FPÖ".
El opositor Partido Socialdemócrata (SPÖ), Hannes Jarolim, comunicó este sábado que presentará una denuncia contra Strache y Gudenus ante la Fiscalía de Corrupción.
Por otro lado, en el vídeo Strache propone que la supuesta millonaria rusa adquiera un gran paquete de acciones del diario Kronen Zeitung, el de más tirada y el más influyente en Austria, para apoyar así la campaña de la formación ultraderechista.
Al barajar esta idea, dice que habría que echar a unos cuantos periodistas del rotativo y colocar a otros cercanos a su formación para cambiar su línea editorial.