Corea del Norte ha reducido las raciones alimentarias que reparte a sus ciudadanos a 300 gramos al día, el nivel más bajo para esta época del año, y se espera que haya más recortes después de que se haya registrado la peor cosecha en una década, ha advertido este viernes el Programa Mundial de Alimentos (PMA).
"Esta nueva evaluación de seguridad alimentaria en Corea del Norte ha detectado que tras las peores cosechas en 10 años, debido a sequías, olas de calor e inundaciones, 10,1 millones de personas se enfrentan a una grave inseguridad alimentaria, lo que significa que no tendrán suficiente comida hasta la próxima cosecha", ha explicado el portavoz del PMA, Herve Verhoosel.
La producción agrícola ha sido de 4,9 millones de toneladas, la más baja desde la de 2008-2009, lo que supone un déficit de 1,36 millones de toneladas, ha precisado Verhoosel.
El pasado mes de marzo, Naciones Unidas solicitó 120 millones de dólares para dar ayuda urgente a 3,8 millones de norcoreanos. Tapan Mishra, coordinador humanitario de la ONU para Corea del Norte, defendiío entonces que las operaciones humanitarias suponen un "sustento crítico" para millones de personas, con el 90 por ciento de la ayuda humanitaria destinada a mujeres y niños menores de cinco años.
"La desnutrición generalizada amenaza a una generación entera de niños, con uno de cada cinco sufriendo atrofias debido a ello", señaló, antes de explicar que ello se suma a "un acceso limitado a los servicios sanitarios y al agua potable".
Asimismo, lamentó la falta de fondos para financiar la asistencia humanitaria. En 2018 solo se recaudó el 24 por ciento del total solicitado, por lo que solo se prestó asistencia a un tercio de las personas previstas, mientras que cerca de 1,4 millones quedaron sin ayuda alimentaria.