El presidente estadounidense, Donald Trump, en una entrevista a la CBS coincidiendo
con su día número 100 en el cargo, ha advertido a Corea del Norte de que no permitirá que siga desarrollando su programa de misiles.
"Quizá no sean demasiado buenos, pero llegará el día en que los tengan, y no
podemos permitir que eso suceda", ha dicho Trump.
El presidente estadounidense insta a no hacer de menos al líder norcoreano, Kim Jong-un: "Hay mucha gente a la que no le gusta que diga esto, pero él tenía 26 años
cuando asumió el poder a la muerte de su padre, está lidiando con tipos duros,
especialmente los generales. Fue capaz de asumir un poder que, estoy seguro, mucha gente ha tratado de quitarle, fuese su tío o quien fuera. Así que, obviamente, es
un chico espabilado".
Kim Jong-un sabe que que no nos va hacer gracia, ni a mí ni al presidente chino Xi, afirma Trump en referencia a los ensayos nucleares de Pyongyang. "Este último ha sido un misil pequeño, no un ensayo nuclear, que esperábamos ver hace tres días. Me consta que China está ejerciendo presión, quizá algo esté cambiando", ha declarado el presidente estadounidense.
Culpa a sus antecesores
Preguntado por si ahora considera a China un socio, Trump asegura que "nunca puedes estar seguro, pero estamos desarrollando una buena relación y no creo que le interese una Corea inestable". Está por ver, continúa, si el presidente Xi es capaz de conseguir un cambio.
La tensión en la península de Corea no es un problema nuevo y Trump acusa de inacción a sus predecesores en el cargo. "Tenemos una situación desde hace años que ya no podemos permitir. La administración de Obama, la de Bush y la de Clinton tenían que haberse encargado de este problema en su día", afirma el ahora presidente.
Trump espera contar con el apoyo de países asiáticos en su postura respecto a Pyongyang. "Necesitamos cooperación de nuestros socios en la región para alinear posiciones, en caso de que algo suceda en Corea del Norte", concluye.
El presidente, que habló la semana pasada sobre la tensión con Corea del Norte con sus homólogos japonés y chino, ha hecho lo propio hoy con sus homólogos de Singapur y Tailandia, a los que ha invitado a la Casa Blanca.