Es frecuente, una vez terminado el día y cerca de la hora de irnos a dormir, sentir la necesidad de picar algo. Muchas veces no tiene nada que ver con el apetito, sino con los antojos por lo que, además, solemos decantarnos por opciones poco saludables. Esto se suma a la prueba científica de que comer por la noche puede hacernos engordar.
La hora a la que hacemos la última ingesta es clave cuando se quiere adelgazar, así que, para evitar sustos con la báscula no hay que olvidar que cuándo comemos es tan importante como qué y cuánto. Esto no quiere decir que no se pueda comer nada, existen opciones que pueden salvarnos de ese momento delante de la nevera buscando qué comer algo a altas horas y, además, proporcionarnos beneficios como, por ejemplo, dormir mejor.
Sobre si la fruta es recomendable cuando se quiere adelgazar o no hay múltiples teorías. Pero, en el caso de las cerezas ácidas no hay duda: son un alimento súper recomendable para tomar antes de ir a dormir. Te contamos por qué.
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Beneficios de las cerezas ácidas
El mes de junio es el mejor para disfrutar de las cerezas ácidas, también llamadas guindas. Una fruta de pequeño tamaño de un color rojo muy intenso de gran valor nutricional por sus propiedades diuréticas, antioxidantes y antiinflamatorias; y por su capacidad para proteger contra las infecciones y mejorar el colesterol.
Un alimento rico en minerales como hierro, calcio, fósforo, azufre, sodio y potasio, y en oligoelementos como zinc, cobre, manganeso o cobalto. También en flavonoides, un tipo de antioxidante que ayuda a estimular el sistema inmunológico. Entre las vitaminas que aportan al organismo se encuentran la vitamina C y la A.
Ayudan a dormir
En el caso de las cerezas ácidas, además, destaca su contenido en melatonina, triptófano y serotonina que inciden positivamente en el estado de ánimo y ayudan a regular el ciclo del sueño.
El zumo de cerezas ácidas es un tentempié ideal para tomar por la noche según se ha demostrado en diferentes estudios. La Universidad Estatal de Louisiana (Estados Unidos) llevó a cabo una investigación en la que aquellos que bebían jugo de cereza dormían casi 1,5 horas más por la noche que el grupo del placebo.
Son diuréticas
La cereza es un depurante natural gracias a su alto contenido en agua, que ronda los 82 gramos por cada 100. Se suma que gracias a su alto contenido en flavonoides y potasio, tienen un alto poder diurético y depurativo.
Esto las convierte en un alimento ideal para ayudar con la eliminación de líquidos, ya que ayudan a perder peso sin riesgo de desequilibrio mineral. También es beneficiosa frente a los problemas urinarios ya que sus propiedades diuréticas y su poder depurativo las hacen apropiadas para pacientes con inflamación, infecciones o cálculos en las vías urinarias.
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Saciantes y con efecto laxante
Su gran capacidad saciante, que consiguen atenuar la sensación de hambre, hace que esta fruta sea un alimento que ayuda en procesos de adelgazamiento. Además, sus ácidos naturales actúan como estimulantes de las glándulas digestivas y su contenido en pectina –fibra vegetal soluble- tiene efecto laxante.
Ricas en fibra
Por su contenido en fibra, las cerezas están recomendadas para las personas que se encuentren a dieta ya que, además de ayudar al tránsito intestinal, colaboran en quemar el exceso de grasas, contribuyen a la hidratación corporal y, como hemos comentado, aumentan la sensación de saciedad.
¿Cómo preparar el zumo de cerezas ácidas?
Para conseguir el mejor resultado, se recomienda tener un extractor de zumos o, en su defecto, una licuadora. Para conseguir un vaso de zumo de cereza ácida se necesita lo siguiente:
Ingredientes
15 cerezas
Hasta 2 cucharadas
Agua
Elaboración
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Agrega las cerezas (limpias y sin semillas) a una licuadora.
- Si te gusta el sabor ácido, no agregues azúcar. De lo contrario, si eres de sabores dulces puedes agregar unas 2 cucharadas de azúcar o jarabe de agave al gusto.
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Agrega el agua poco a poco y licúa al mismo tiempo.
- Filtra el jugo con un colador para eliminar los pedacitos de piel de cereza.
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Servir en frío y, si te gusta, con hielo.
Beneficios de comer frutas de temporada
Se denominan frutas de temporada las cultivadas y recolectadas en los meses más adecuados según el ciclo natural de la planta. Se ha comprobado que respetando los tiempos, su carga nutricional es más elevada. En temporada, las frutas contienen una mayor proporción de micronutrientes y antioxidantes, lo que se nota en casi todo.
Consumir fruta en su temporada asegura consumir un producto fresco, demás de ser más sabrosa, tener mejor olor y color dado que está en su mejor momento. Las frutas de verano son un alimento perfecto para adaptarnos al cambio de temperatura que implica el cambio de estación por su alto contenido en agua.
Las frutas de junio por excelencia son las conocidas como frutas de hueso: la cereza, el albaricoque, el melocotón y la nectarina. Se caracterizan por su elevado contenido en antioxidantes y betacarotenos, un precursor de la vitamina A.