A medida que los niveles de estrógeno disminuyen con la edad, muchas mujeres experimentan síntomas molestos que pueden causar incomodidad, dolor durante las relaciones sexuales y un aumento del riesgo de infecciones. Una solución natural que ha ganado atención por su potencial para mitigar estos síntomas son los fitoestrógenos.
¿Cuándo aparece?
La sequedad vaginal surge cuando los tejidos de la vagina no están suficientemente lubricados. Este síntoma es particularmente común durante la perimenopausia, debido a las fluctuaciones en los niveles hormonales: el estrógeno, responsable de mantener la vagina lubricada y elástica, disminuye durante este periodo, causando así sequedad, picazón y dolor durante las relaciones sexuales.
Un estudio publicado en el Journal of Women's Health encontró que más del 60% de las mujeres en perimenopausia experimentan sequedad vaginal, y muchas no reciben el tratamiento adecuado debido a la falta de información o la vergüenza de discutirlo con sus proveedores de salud. Otro estudio relacionado destacó la importancia del diagnóstico precoz y las intervenciones personalizadas para mejorar la calidad de vida.
Los fitoestrógenos
Los fitoestrógenos son compuestos químicos naturales presentes en ciertas plantas que imitan la acción del estrógeno, la hormona sexual femenina, dentro del cuerpo humano.
Debido a su estructura similar, estos compuestos pueden vincularse a los receptores de estrógeno en las células y ejercer efectos débiles, lo cual puede ser particularmente beneficioso para las mujeres que experimentan una disminución en los niveles naturales de esta hormona.
Fuentes comunes de fitoestrógenos
Algunas de las fuentes más ricas en fitoestrógenos incluyen:
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Soja y productos derivados como el tofu, leche de soja, tempeh y edamame.
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Semillas de linaza, reconocidas por su alto contenido de lignanos, un subtipo de fitoestrógenos.
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Frutos secos y semillas: las almendras y semillas de sésamo incluyen una gran cantidad de fitoestrógenos.
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Legumbres, como garbanzos y lentejas.
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Cereales integrales, entre los que se encuentran la cebada y la avena.
Efectos en la sequedad vaginal
La inclusión de fitoestrógenos en la dieta ha sido estudiada por su posible rol en aliviar la sequedad vaginal. Estos compuestos pueden ayudar a mejorar la lubricación y elasticidad vaginal mediante un aumento de la hidratación de los tejidos, aumentando la producción de moco y mejorando así la hidratación en la zona vaginal.
Además, los fitoestrógenos ayudan a mejorar el flujo sanguíneo en los tejidos vaginales, y reducen la inflamación mientras disminuyen la irritación y la sequedad.
Diversos estudios han investigado los efectos de los fitoestrógenos en los síntomas menopáusicos. Uno de ellos, publicado en el Journal of the North American Menopause Society, encontró que las mujeres que consumían alimentos ricos en fitoestrógenos reportaban una menor prevalencia de sequedad vaginal y otros síntomas menopáusicos. Aunque los fitoestrógenos son generalmente seguros y bien tolerados, es recomendable consumirlos como parte de una dieta equilibrada.
Otras opciones
Existen, además, otras estrategias que se pueden adoptar para manejar la sequedad vaginal durante la perimenopausia:
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El uso de hidratantes vaginales para mantener la humedad natural de la zona íntima.
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Una terapia de reemplazo hormonal (TRH) para mujeres con síntomas severos, administrando estrógenos para compensar la disminución hormonal natural.
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Cambios beneficiosos en el estilo de vida.
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Ejercicios regulares para fortalecer el suelo pélvico.