Estos son los alimentos antiinflamatorios naturales que acaban con la hinchazón digestiva

La inflamación sistémica se agudiza a medida que cumplimos años y para evitarla podemos recurrir a realizar ejercicio, evitar el estrés, además de dormir y alimentarnos bien.

Una dieta ideal debe favorecer el consumo de alimentos vegetales sobre los animales, tomar frutas y verduras frescas, hidratos de carbono integrales, legumbres, frutos secos, pescado azul y carnes magras.

En la alimentación diaria también podemos incluir una serie de nutrientes o sustancias que está probado científicamente, que cuentan con propiedades antiinflamatorias.

En el lado opuesto, aquellos alimentos que favorecen la inflamación y que se consideran dañinos para la salud y la digestión se encuentran los refrescos, los carbohidratos refinados, las carnes rojas y, sobre todo, los productos procesados.

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Según un estudio presentado por The BMJ y en el que participaron médicos de todo el mundo, el aumento exponencial de procesados, cuyo consumo creció a un 82%, está directamente relacionado con el aumento de problemas relacionados con la inflamación digestiva.

Algunas de las enfermedades más comunes que pueden surgir como consecuencia del consumo abusivo de estos alimentos son cólicos, úlceras, obstrucción intestinal o cáncer de colon.

Alimentos antiinflamatorios

Con propiedades antiinflamatorias, estos alimentos son considerados verdaderas joyas por los nutricionistas ya que, además de fortalecer el sistema inmunitario, ayudan a mantener una buena salud de forma natural.

Pero ¿cuáles son los alimentos con propiedades antiinflamatorias imprescindibles en la dieta, y cuáles deberías evitar?

Según el Dr. Frank Hu, profesor de Nutrición en la Universidad de Harvard, “muchos estudios experimentales han demostrado que algunos de los componentes de alimentos o bebidas pueden tener efectos antiinflamatorios”. Con esto se hace referencia a las bebidas conocidas como smoothies que incorporan frutas y verduras de una forma sencilla a nuestra dieta.

Desde Eat This, Not That recomiendan el consumo de frutos secos. Son beneficiosas las nueces, que se ha demostrado que reducen los marcadores de inflamación, los pistachos, las almendras y semillas de chía y lino. El café también resulta un aliado contra la inflamación, dado que contiene polifenoles y otros compuestos antiinflamatorios.

Además de frutas como la piña, la manzana, la papaya, las cerezas, las frutas cítricas y los frutos rojos, entre otras. Las verduras de hoja verde como las espinacas, el brócoli o el apio han sido considerados como elementos clave en la mejora de la digestión según os investigadores dirigidos por la Harvard T.H. Chan School of Public Health. 

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Otra bebida clave para paliar la indigestión y pesadez es el té verde, rico en antioxidantes y catequinas, compuestos antiinflamatorios, o especias como el jengibre, la cúrcuma y la canela, todo sustentado bajo el mismo estudio.

Los pescados azules como el salmón, el atún y las sardinas, son los más destacables y ricos en ácidos grasos omegas - 3. Investigadores de la Escuela de Medicina de San Diego (Estados Unidos) han identificado esta propiedades antiinflamatorias en el pescado azul.

Un plus a añadir a tu dieta serían los probióticos, componentes del yogur y el kéfir, que ayudan a equilibrar la flora intestinal y reducir la inflamación.
Todos ellos poseen nutrientes, vitaminas y minerales esenciales para evitar la inflamación y fortalecer el sistema inmunitario, así lo recomienda el Servicio de Digestivo de la Mutua de Terrassa. 

Alimentos a evitar

Cómo hemos mencionado anteriormente, los alimentos que deberíamos eliminar de nuestra dieta si fuera posible, o por lo menos reducir y controlar su consumo son principalmente los ultraprocesados con azúcar o sal añadida, incluyendo aperitivos o postres ya preparados.

Los aceites refinados, como el girasol o la colza utilizan en su lugar el 'oro líquido' en referencia al aceite de oliva, cuyos beneficios son innumerables. También deberíamos tener en cuenta los productos que poseen harinas refinadas, como las pastas y el pan blancos, y finalmente el alcohol.

Además, tal y como dictamina el Instituto Europeo de Dietética, Nutrición y Salud los alimentos proinflamatorios, aceleran el envejecimiento y fomentan la posibilidad de contraer enfermedades y diferentes tipos de malestares.

Estos expertos advierten que una alimentación basada en grasas trans, aceites vegetales y azúcares refinados, pobre en los nutrientes esenciales y antiinflamatorios, incrementa la inflamación crónica, siendo ésta una de las mayores afectaciones gastrointestinales. Un problema que ha aumentado en los últimos años debido al aumento del consumo de alimentos procesados.