La menopausia o climaterio es un proceso natural por el que pasarán todas las mujeres, antes o después. A pesar de ello, todavía existe un gran desconocimiento sobre los primeros signos de la menopausia o cómo saber que se acerca el fin de los ciclos menstruales. También es muy frecuente consultar qué efectos son normales en mujeres menopáusicas.

[Por qué se puede engordar en la menopausia y otros cambios que pueden afectarte]

Normalmente, la menopausia surge alrededor de los 50 años, según recoge la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia. En general, se produce de forma natural en la mujer: se interrumpe la menstruación y los ovarios no segregan estrógenos y progesterona, que son las hormonas sexuales femeninas.

Aunque lo más frecuente es que se produzca de forma natural a una determinada edad, ya que con el paso del tiempo los ovarios van disminuyendo la producción de estrógenos y progesteronas, lo que repercute en la menstruación y la fertilidad, también existen otras causas que la pueden provocar:

  • Insuficiencia ovárica precoz. La menopausia puede adelantarse por esta causa, 1 o 2 décadas incluso.

  • Cirugías de ovario. Al extraer los ovarios de forma quirúrgica, la mujer intervenida experimenta una menopausia repentina, lo que suele intensificar los síntomas. En cuanto a la operación de útero o histerectomía, si se han conservado los ovarios, la menopausia no tiene por qué adelantarse.

  • Tratamientos oncológicos. Sobre todo, la radioterapia y la quimioterapia pueden provocar la menopausia, que puede ser temporal. La función ovárica sí se puede ver comprometida si se administra radioterapia sobre los ovarios.

Cómo sé que voy a entrar en la menopausia

Esta pregunta es una de las más habituales en la consulta de Ginecología y Obstetricia. La principal señal de que una mujer ha empezado con la menopausia son los cambios en la menstruación. Eso sí, cada mujer lo puede experimentar de diferente forma.

Normalmente, no se corta la menstruación de repente, sino que antes suelen producirse periodos irregulares. Por ejemplo, un caso muy habitual de mujeres en premenopausia es que no tienen el periodo durante uno o más meses y, de repente, vuelve.

Otro cambio muy habitual en la premenopausia es que el periodo menstrual dura menos, pero ocurre de forma más seguida. Mientras que otras veces, son las hemorragias las protagonistas.

Se diagnostica la menopausia cuando ha pasado un año desde la última vez que se tuvo la menstruación.

Primeros síntomas de la premenopausia

Las mujeres pueden experimentar estas señales antes de la menopausia:

  • Menstruaciones irregulares
  • Sequedad vaginal
  • Sofocos
  • Sudores durante la noche
  • Dificultad para descansar
  • Cambios anímicos
  • Ganancia de peso
  • Pelo fino
  • Sequedad en la piel
  • Cambios en el volumen del pecho

Efectos en el cuerpo 

El cuerpo de las mujeres puede cambiar durante la menopausia, debido a la bajada de estrógenos y progesterona.

Uno de los cambios más conocidos de la menopausia es que la grasa corporal pasa a acumularse en otras zonas del cuerpo, como el abdomen, y esto puede agravarse en las mujeres que no practican ningún ejercicio físico.

Además, las mujeres que han entrado en la menopausia tienen más riesgo de sufrir un deterioro de los huesos, ya que pierden el efecto protector de los estrógenos y, en consecuencia, se aumenta su descalcificación. Esto puede acabar generando osteoporosis, una enfermedad que debilita los huesos hasta llegar a producir fracturas.

Otro efecto es la pérdida de hidratación y elasticidad en la piel, haciendo que se vea seca, con arrugas más marcadas e incluso con irritaciones. Una vez más, esto sucede por la bajada de estrógenos que, a su vez, causa una menor producción de colágeno en la piel.

Igualmente, el tejido de las encías y los dientes se deteriora durante la menopausia, y esto puede provocar la pérdida de piezas dentales o que aparezcan enfermedades de las encías.

Por otra parte, la menopausia también afecta a nivel emocional. A menudo las mujeres menopáusicas sienten irritabilidad, apatía y tristeza a causa de las alteraciones hormonales.

Dieta para combatir los síntomas 

La alimentación, junto a otros hábitos saludables, pueden ayudar a aliviar las molestias de la menopausia.

Por un lado, la dieta tras la menopausia debe contener alimentos ricos en calcio, como productos lácteos desnatados o leche. Asimismo, debe incluir frutas y verduras, que aportan multitud de vitaminas y minerales. Y, dos días a la semana como mínimo, se debe añadir legumbres o soja en el menú.

En cuanto a la fibra, es importante incluirla, pero sin excesos, ya que puede interferir en la absorción de calcio si se toma en una gran cantidad.

En cambio, es aconsejable vigilar el consumo de sodio, sobre todo en mujeres con hipertensión, y alimentos animales que contengan demasiadas grasas saturadas. Otra recomendación alimentaria en la menopausia es no pasarse con la cafeína, que también puede afectar a la absorción del calcio.

A todo ello hay que añadir la importancia de las revisiones periódicas ginecológicas, que no deben abandonarse durante o después de la menopausia.

Y actualmente en las unidades de menopausia podemos individualizar el tratamiento médico mas adecuado en función de los síntomas que tenga cada mujer.

*La doctora Carmen Pingarrón Santofimia, Jefa de Equipo de Ginecología Hospital Quirónsalud San José.