El Ministerio de Igualdad se ha propuesto reformar la Ley del Aborto para crear una norma más amplia. Pretende que en esta no solo garantice el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo en la sanidad pública, sino que se amplíen y refuercen los derechos sexuales y reproductivos.
Si bien el planteamiento causó cierto malestar entre los sanitarios, de hecho, el Colegio de Médicos se ha pronunciado en contra de medidas como la limitación del derecho a la objeción de conciencia sobre la práctica de abortos; la intención del equipo de Irene Montero de incluir en la legislación una baja laboral para mujeres que sufren reglas dolorosas cuenta con un amplio respaldo médico.
Ningún país miembro de la Unión Europea cuenta con una baja menstrual de forma generalizada. Sin embargo, los países asiáticos sí cuentan con estos permisos porque existe la creencia cultural de que no descansar durante el periodo menstrual puede afectar al parto.
Txanton Martínez-Astorquiza, presidente de la Sociedad Española de Ginecología (SEGO), ha explicado, según ha publicado El Periódico de España, que apoya el permiso laboral siempre que esté avalado por un médico ya que el dolor menstrual puede ser incapacitante. Aunque el problema es que no siempre hay un diagnóstico asociado.
El dolor puede remitir, en ocasiones, con analgésicos, pero en otras es tan fuerte que apenas remite y provoca malestar, irritabilidad y dolores asociados. A todo ello se debe añadir el síndrome premenstrual que sufren muchas mujeres una semana antes de la regla. Este también provoca dolores e hinchazón en pecho y abdomen.
Si bien no hay datos rigurosos al respecto, se calcula que entre un 25% y 50% de las reglas son dolorosas por quistes, miomas, pólipos, infecciones o enfermedades, aunque a veces no se encuentra la causa.
Hay estudios que señalan que el 70% de mujeres ha sufrido alguna vez una menstruación dolorosa.
Un posible riesgo laboral
Ahora bien, esta situación corre un riesgo que debe ser atajado desde el plano legislativo.
Dada la gran incidencia y que no siempre hay un diagnóstico médico, la posibilidad de que las mujeres estén unos días de baja todos los meses es algo que puede volverse en su contra a la hora de buscar trabajo o promocionar.
En este sentido, en declaraciones a El Periódico, Martínez-Astorquiza solicitó al Gobierno que la norma "se negocie con todos los sectores afectados, sea meditada y consensuada e incluya mecanismos de control" de forma que las bajas no acaben perjudicando a las mujeres y tampoco a las empresas. La ley, en su opinión, debería recoger todas las opciones de actuar.
Actualmente, Igualdad, a cargo de la ministra Irene Montero (Unidas Podemos), está negociando la ley con el PSOE. Aún no hay un horizonte claro de aprobación por parte del Consejo de Ministros en tanto que hay varios puntos a limar con el Ministerio de Sanidad, como la regulación de la objeción de conciencia.
Sobre las bajas menstruales, Ángela Rodríguez, secretaria de Estado de Igualdad, ya manifestó que plantean que el permiso exista cuando los síntomas estén dentro "del encuadre sanitario que se utiliza para las incapacidades temporales".
Además, anunció la intención de rebajar los impuestos de los productos de higiene femenina y que haya educación menstrual en los colegios.
Actualmente, los productos para la menstruación están gravados con un 10% de IVA. Una de las promesas del Gobierno era reducir la conocida como 'tasa rosa' y que incluyese este tipo de productos, pasando a tener un 4% de IVA. Sin embargo, dicha iniciativa todavía no se ha llevado a cabo.