Cuatro años. Son los que llevan el príncipe Harry y Meghan Markle en Estados Unidos, alejados de los focos y de la familia real británica. No es por lo tanto casualidad que cada una de sus apariciones se convierta en un fenómeno.
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Este 12 de abril, la pareja, quien anunció recientemente su regreso a la televisión y el lanzamiento de su nueva marca llamada American Riviera Orchard, apareció en un partido benéfico de polo celebrado en Wellington, Florida.
En esta ocasión, que recuerda el compromiso solidario de los duques de Sussex, Meghan deslumbró con un vestido marfil firmado por Heidi Merrick. Se trata, concretamente, del vestido Ginger, un modelo de corte midi, sin mangas, con cuello tipo bufanda largo que se puede atar en el costado o en la espalda. Su detalle clave es la apertura en la zona del abdomen, que le brinda un toque más sensual. Se compone de seda y cáñamo e incorpora un forro de poliéster satinado claro.
Está hecho en California, lo que también confirma el compromiso sostenible de la duquesa, que apuesta por diseños locales. Está al precio de 492,95 €. Lamentablemente, ha sido víctima de su éxito, ya está agotado en la página web de la firma.
Meghan Markle completó el look con un par de gafas negras XL, pendientes dorados de Chanel, un bolso de Valentino y salones a juego, de Aquazzura.
Esta elección hace eco al estilo sofisticado de la duquesa quien siempre destacó por su buen gusto. Los expertos de Zottier recuerdan que la paleta de los neutros es una constante del estilo de la duquesa: "Si algo hemos visto en las apariciones de la ex actriz Meghan Markle es la sencillez por la que apuesta tanto en el diseño de las prendas como en los colores utilizados. La actual duquesa de Sussex, y esposa del Príncipe Harry y duque de Sussex, siempre ha mostrado predilección por los tonos neutros, aunque detrás de este gusto hay otra razón que ella misma afirma en su nuevo documental, Harry & Meghan, que está causando sensación entre seguidores y detractores de la pareja. Tal como Meghan afirma, no puede llevar el mismo color que Su Majestad en un mismo evento, por lo que decidió optar por colores más discretos".
Añaden: "Markle tiene predilección por los looks de estilo working en los que predominan prendas como blazer o trajes, camisas blancas y stilettos o botines de tacón. Un estilo formal en el que no hay margen de error a la hora de acudir a cualquier evento manteniéndose en un perfil bajo, como acostumbra a hacer".