La invasión de Rusia ha despertado una oleada de solidaridad hacia Ucrania desde todas las partes del mundo.
Instituciones públicas, empresas, ONGs, asociaciones y particulares han puesto en marcha distintas iniciativas para ayudar al pueblo ucraniano. Se han enviado medicinas, ropa y alimentos, cientos de personas se han desplazado a la frontera para transportar refugiados…
Seguro que ya conoces estas formas de ayudar, pero ¿sabes que también puedes hacerlo comprando ropa? Esta fórmula consiste en apostar por las empresas patrias que aún resisten a la invasión y que se han convertido en un pilar fundamental para la economía e industria del país.
Es una forma de ayudar desde casa y encima conseguir una prenda estupenda. A continuación, te presentamos las cinco principales marcas con las que puedes colaborar:
Sleeper
La marca nació durante la revolución ucraniana. “En aquellos días más oscuros, sentimos más claramente que nunca nuestra identidad nacional y nuestra fuerza, que era tan inmensa que creó las prendas únicas y hermosas que hoy son hechas por las manos de nuestras increíbles mujeres”.
Las prendas de Sleeper son multipropósito, de alta calidad y fabricadas éticamente, diseñadas para ayudar a quien las vista a sentirse hermosas, “independientemente de si usas Sleeper en la calle o en la comodidad de tu hogar”.
“Nuestra misión siempre ha sido traer luz al mundo. Ahora más que nunca necesitamos difundir esa luz lo más lejos y lo más posible. Hemos donado un millón de hryvnas para apoyar las actividades defensivas del ejército ucraniano y lo invitamos a seguir nuestro ejemplo en nombre de la paz”.
En su web, tienen un apartado en el que presentan cinco opciones con las que, además, los clientes pueden apoyar al país en el conflicto.
Bevza
La marca de moda se caracteriza por diseñar prendas con siluetas limpias y sofisticadas, sastrería nítida y paleta de colores suaves. Si bien se centra en la elegancia y la sensualidad, ofrece una nueva perspectiva sobre el minimalismo refinado. El ‘concepto de vestido blanco’ se basa en la idea de la prenda pura e icónica.
En Bevza creen en la importancia de una actitud ética hacia la naturaleza y la producción. Por ello, diseñan productos de calidad hechos para durar usando materiales y técnicas cuidadosamente considerados.
Debido a la guerra, en su web informan a todos los clientes que los productos tardarán en llegar entre dos semanas y un mes. Además, un 10% será donado para apoyar al ejército ucraniano.
Ksenia Schnaider
Esta casa de moda, con un nombre difícilmente pronunciable en español, crea prendas reelaboradas, recicladas, patchwork, denim y accesorios para hombres y mujeres.
La sostenibilidad es parte del ADN de Ksenia Schnaider. “El compromiso ha sido evidente en todas las prendas, perfectas para el consumo responsable y un estilo de vida ocupado”.
Su equipo se ha visto obligado a priorizar su seguridad y cuidar de sus familias durante la guerra. “Nuestro negocio ha sido brutalmente detenido”.
Como no pueden darse el lujo de esperar los pagos al por mayor, solicitan a los clientes que compren una tarjeta de apoyo que ayudará a proporcionar alimentos y suministros médicos a su equipo por la guerra. “Oramos por la paz e inmediatamente después del final de la guerra volveremos a trabajar y este apoyo financiero se convertirá en certificados de regalo”.
Se pueden comprar tarjetas por un valor de cinco, cincuenta y quinientos dólares.
Poustovit y Paskal
Poustovit es una marca de moda femenina que pretende dar relevancia a la sofisticación. Los vestidos, la sensualidad, el positivismo y la confianza son la esencia de la firma.
Los diseños especiales, estampados personalizados, formas simples y detalles inusuales. “Es una marca romántica, pero sin pasarse; sexy, pero no agresiva. Siempre está en movimiento, las prendas están elegidas para complementar la personalidad de cada clienta y proporcionarles una sensación de plenitud".
Paskal, por su parte, es conocida por elaborar prendas con siluetas delicadas y formas minimalistas. Su belleza se deriva de los componentes básicos y la construcción de las prendas. El corte por láser es el núcleo del ADN de la marca.
“El resultado es un diseño sensible con una fuerte personalidad”.