Seguro que te ha pasado alguna vez: una mañana te pones tus vaqueros favoritos para ir a trabajar y al día siguiente te cuesta abrocharlos. Es un problema más común de lo que te crees, y se debe a la retención de líquidos.
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La retención de líquidos o edema ocurre cuando se acumula un exceso de fluido en los tejidos corporales. Este fenómeno puede presentarse en distintas zonas, incluyendo las piernas hinchadas, tobillos, manos y abdomen, a menudo provocando molestias y afectando la calidad de vida.
Se trata de un desequilibrio en nuestro cuerpo que ocasiona pesadez e hinchazón, y que muchas veces puede afectar incluso a nuestra autoestima al ver que nuestro cuerpo cambia de un día para otro, ya que ante el espejo nos ofrece la sensación de que hemos aumentado de peso.
Se debe básicamente a fluctuaciones hormonales (síndrome premenstrual, por ejemplo), así como a los efectos de una vida sedentaria o incluso a enfermedades asociadas como problemas cardíacos, hepáticos, hipertensión, el efecto del estrés y también las contraindicaciones de varios medicamentos.
Si bien, lo fundamental es siempre acudir a un profesional para tratar el problema de forma íntegra, existen varias infusiones naturales que ayudan a solucionar este problema de forma fácil y sencilla.
Infusión de boldo
Las hojas de boldo son perfectas para tratar la retención de líquidos gracias a que tienen alcaloides de isoquinolina y quinolizidina, aceites muy adecuados para favorecer la correcta circulación.
Para su preparación, no tienes más que poner seis hojitas con una taza de agua hirviendo. Dejamos reposar 5 minutos y bebemos poco a poco en el desayuno y después de la comida principal.
Té de diente de león
El diente de león es una excelente aliada para depurar, que podemos tomar tanto en infusión como en ensaladas. Nos permite eliminar líquidos y favorecer el correcto funcionamiento de los riñones.
Una infusión de diente de león
Es una planta maravillosa. Puedes beneficiarte de ella realizando dos infusiones al día, una en tu desayuno y otra a media tarde. No tienes más que poner unas cuantas hojas o flores de esta planta y dejar que llegue a ebullición. Después, filtra el contenido y bebe poco a poco. Te dará buen resultado.
Cola de caballo
Puedes encontrarla en tiendas naturales e incluso en farmacias. Es una planta con abundantes sales minerales, especialmente silicio, potasio y magnesio.
Además, es diurética, remineralizante, astringente y antidiarreica. ¿Cómo perder la oportunidad de beneficiarnos de ella? Sería ideal que la tomaras dos veces al día, poniendo el equivalente de una cucharita a hervir en una taza de agua. Si la mezclas con anís o menta tendrá mejor sabor.
Deja que repose cinco minutos y tómala poco a poco. Si eres constante notarás la mejoría que puede aportar la infusión de cola de caballo.
Té verde
Excelente infusión que favorece la diuresis. Con el té verde no solo se favorece la diuresis para que el organismo deseche toxinas acumuladas, sino que además conseguimos reducir la inflamación y eliminar los líquidos retenidos. ¡Es muy beneficiosa!
Puedes tomar hasta tres tazas al día para tratar la retención de líquidos. Ya sabes que el té verde es fácil de encontrar, y mejor que lo endulces con miel antes que con azúcar normal, es más sano.
Otras recomendaciones para evitar la retención de líquidos
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Beber dos litros de agua al día: si te cuesta un poco, añade un poco de jugo de limón y te será más agradable
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Dieta baja en sodio: eliminar la sal en las comidas. Puedes aderezar tus platos con otras plantas aromáticas, o con vinagre, limón, ajo o cebolla.
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Dieta rica en verduras y hortalizas: como calabazas, tomates, espárragos, alcachofas.
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Tomar plátano: son muy ricos en potasio y ayudan a prevenir la retención de líquidos.
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Práctica ejercicio regular: No olvides hacer algo de ejercicio, basta con una hora al día: una caminata, un paseo en bici, etc.