Las uñas acrílicas son una opción perfecta para cambiar, dar estilo, forma o alargar tus uñas rápidamente que se ha convertido en una de las opciones de manicura favoritas en la mayoría de los salones de belleza en España y a las que cada vez se suman más mujeres en nuestro país.

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Existe un momento crítico de este tipo de manicuras y ese es cuando llega el momento de quitarlas. Y es que su acabado, tan natural, y su larga duración, es precisamente gracias a la calidad y resistencia del material que las compone.

Pasado un tiempo tocará renovarlas o quitarlas y eso requiere de una buena técnica o del material adecuado para evitar dañar nuestras uñas naturales. Y aunque lo más recomendable es que te pongas en manos de un profesional, también es posible retirarlas en casa.

Precisamente para que puedas retirar tus uñas acrílicas de forma fácil, rápida y sin dañar tus uñas, te invitamos a seguir los siguientes pasos.

Comienza recortando y puliendo las uñas

Para comenzar a eliminarlas tendrás que empezar recortando todo el exceso de longitud de sus acrílicos y pulir el esmalte con una lima hasta que el brillo desaparezca por completo. Un primer paso que facilitará mucho más quitar las uñas y que permitirá que la acetona se absorba.

Elementos necesarios: un cortaúñas, una lima y quitaesmalte de acetona.

Instrucciones

  • Paso 1: Con un cortaúñas recorta las uñas acrílicas lo más cortas posible sin cortar las uñas reales y sin dañarlas.
  • Paso 2: Elimina el esmalte con un poco de acetona y usa el lado grueso de la lima de uñas para quitar la capa superior brillante.
  • Paso 3: Continúa limando suavemente las uñas hasta que el brillo desaparezca por completo, pero con cuidado de no pulir demasiado el acrílico, ya que podría terminar debilitando o dañando las uñas naturales. Un buen truco es dejar una fina capa de acrílico que cubra toda la uña natural, y en remojo de acetona se encargará del resto.

Cómo quitar tus uñas acrílicas en casa y paso a paso sin dañarlas

Para retirar tus uñas acrílicas con acetona en casa podrás escoger entre uno de estos dos métodos:

Método con acetona 1: lámina 

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La acetona no deja de ser un químico con un aroma intenso que puede dejar las uñas frágiles y secas. Aún así, siempre que realicemos este proceso con acetona y con cuidado, será completamente seguro y una buena opción.

Con el método lámina asegurarás un contacto mínimo de la piel con la acetona y aunque es un poco complicado, con un poco de tiempo y paciencia conseguirás que tus acrílicos se quiten de forma segura y rápida.

Elementos necesarios: Acetona pura, bolas o discos de algodón, papel de aluminio, toalla caliente, lima de uñas y removedor de cutícula.

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Instrucciones

  • Paso 1: Remoja el disco o la bola de algodón en acetona y colócala sobre el lecho ungueal cubierto de acrílico. Una vez cubierta toda el área, envuélvelo firmemente con un pequeño trozo de papel de aluminio. 
  • Paso 2: Cuando tengas tus uñas envueltas, aprieta cada una de ellas para ver si gotea un poco de acetona de ellas, si esto ocurre es que tienes suficiente acetona en el algodón. Deja que cada uña se remoje un mínimo de 10 minutos, si aún así el acrílico no se ha descompuesto correctamente puedes dejarlo hasta 20 minutos. Para acelerar el proceso, coloca una toalla caliente sobre las uñas envueltas en papel de aluminio, ya que la acetona caliente funciona más rápido.
  • Paso 3: Retira el papel de aluminio y pule suavemente cualquier resto de acrílico que pueda quedar. Usa un removedor de cutículas para raspar suavemente cualquier exceso.

Método 2 con acetona: remojar

En este segundo método, necesitarás menos mano de obra, pero expondrás tu piel a un nivel más alto de acetona. Aunque no tiene por qué ser perjudicial, asegúrate de seguir todos los pasos adecuados para hacerlo de forma correcta.

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Elementos necesarios: Acetona pura, tazón, agua tibia lima de uñas y removedor de cutícula.

Instrucciones

  • Paso 1: Coge tu bote de acetona y colócala bajo agua tibia. Este paso no es 100% necesario, pero la acetona tibia acelerará el proceso de eliminar las uñas acrílicas.
  • Paso 2: Después vierte la acetona en un recipiente y sumerge todas las uñas, dejándolas a remojo unos 30 minutos, Mientras se remojan usa el pulgar para frotar suavemente y ayudar a que el acrílico se retire.
  • Paso 3: Notarás una consistencia pegajosa cuando el acrílico comience a derretirse, así que coge el removedor de cutículas y raspa suavemente el lecho ungueal. Cuando la mayor parte de haya ido y haya terminado de remojarse, seca las uñas y usa la lima para eliminar el exceso de acrílico.

Hidratación de las uñas

Después de retirar el acrílico y sin importar el método que hayas utilizado para ello, para finalizar el proceso deberás hidratar tus uñas naturales, ya que tus uñas estarán muy secas después de cualquiera de estos dos métodos.

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Elementos necesarios para hidratarlas: agua tibia, jabón suave, aceite de cutícula y esmalte fortalecedor de uñas.

Instrucciones

  • Paso 1: Después de retirar el acrílico lava las manos con agua tibia y jabón suave, para asegurar que no quede ningún exceso de acetona en la piel.
  • Paso 2: Aplica aceite de cutículas alrededor de los lechos de las uñas para ayudar a humectar el área.
  • Paso 3: Si tus uñas están débiles o dañadas, utiliza un tratamiento fortalecedor de uñas que puede ser en formato esmalte y aplícalo un par de veces por semana en las uñas.