Conseguir un look de belleza exitoso puede convertirse en un auténtico rompecabezas. Pese a la abundancia de tutoriales en redes sociales, acertar depende de múltiples factores, entre ellos, nuestra piel, las herramientas utilizadas o la técnica de maquillaje en sí.
¿Pero cómo lograrlo, en un plazo razonable? Los expertos coinciden en la importancia de la limpieza antes de iniciar el maquillaje en sí: "La limpieza facial es fundamental para eliminar el exceso de grasa, suciedad, células muertas y residuos de maquillaje que pueden obstruir los poros y provocar imperfecciones. Además, ayuda a equilibrar el pH de la piel y a prepararla para la absorción de otros productos de cuidado", asegura Aura Serras, directora de iS CLINICAL España.
Seguidamente, es clave hidratar la piel, sea cual sea su tipo, y más en verano: "La deshidratación puede provocar sequedad, tirantez e incluso descamación de la piel, que tiende a agravarse en los meses de más calor. Es fundamental utilizar productos hidratantes que ayuden a restaurar y mantener el equilibrio de humedad de la piel, manteniéndola suave, flexible y protegida", añade la experta.
El corrector
La elección de las zonas de aplicación del corrector es clave, según recuerda Nerina Freán, national makeup artist de Givenchy, quien recomienda el Prisme Libre Skin-caring Concealer: "Vamos a colocar tres puntitos en la zona de la ojera, dos puntitos en la zona T, uno de cada lado de la nariz y un puntito en la parte baja del labio para generar un efecto lifting. Solo falta difuminar".
Mario Dedivanovic, creador de Makeup by Mario, recomienda a su vez aplicar el corrector directamente con el aplicador bajo los ojos, en el área de la ojera, depositando más producto en la zona más cercana en la nariz y dejando el canto del ojo sin producto.
Además, no aplica el corrector muy cerca de la raíz de las pestañas, sino que deja medio centímetro libre, concentrando el producto en el extremo de la ojera, para luego poder difuminar bien el producto. Uno de sus secretos es usar la brocha, primero a toquecitos muy suaves, con delicadeza, y luego con gestos de arrastre muy suaves, para fundir el producto perfectamente con la tez.
El colorete
La experta de Givenchy recomienda "comenzar con la parte alta de la mejilla, para luego extenderlo hacia el ancho de la oreja. Esta es la altura exacta. Si un día queremos un acabado líquido o cremoso, colocamos un poquito de mist y lo mezclamos".
¿Un tip clave para conseguir un efecto esculpido? "El colorete, además de aplicarlo en la zona de las mejillas, me gusta mezclarlo con un poco de polvos de sol y pasarlo ligeramente por el párpado fijo superior. Esto aporta mayor calidez y hace que el 'bronceado-contouring' se vea todavía más natural", añade Ángela Blanco, makeup artist, consultada por Masqmai. "Otro truco que me encanta con el colorete es aplicarlo por encima de la nariz y un poco en la barbilla, dando ese efecto piel de verano que tanto favorece".
El makeup-artist de Guerlain Anthony Chasset recomienda asimismo la técnica de la 'W': "Es muy sencillo, hay que comenzar en la sien, a la altura del ojo, y trazar una curva descendente por debajo del pómulo. Después, hay que ascender hasta la zona de la frente y repetir en el otro lado del rostro. Al terminar, basta un toque en la barbilla para conseguir el ansiado healthy glow".
Las sombras de ojos
Para crear una mirada abierta y luminosa, Anthony Chasset recomienda "extender el tono más oscuro a ras de las pestañas inferiores mediante pequeños toques sobre las superiores para después trazar una línea vertical mínima en la zona exterior y unirla con el lagrimal en diagonal de arriba abajo. El tono medio resulta perfecto para crear la siguiente capa y difuminar bien el punto de unión. Para terminar, el tono más claro se reserva a la cuenca y al extremo interior del ojo".
La máscara de pestañas
Gisela Bosque, national makeup artist de Sephora, destaca: "Tras aplicar la máscara en la parte anterior de las pestañas -como de costumbre-, fija la vista en el suelo y cubre con cuidado la parte posterior. Gira la muñeca hacia arriba al llegar a las puntas para rizarlas más".
"Utiliza un cepillo pequeño para sombras que te permita depositar sobre las pestañas un polvo translúcido antes de la primera capa de máscara", señala Gisela Bosque. "Esto ayudará a que el producto se adhiera a las pestañas, haciéndolas parecer más densas".
"Para personalizar el aspecto de las pestañas, cambia el ángulo del cepillo: sujétalo horizontalmente para unas pestañas más gruesas, en vertical para cubrir cada pestaña y conseguir un acabado más natural, y muévelo desde la línea de las pestañas hasta las puntas para mantener el rizo", aconseja la experta de Sephora.
Finalmente, sugiere: "Emplea el cepillo de la máscara a modo de delineador, asegúrate de que el cepillo está bien cargado de producto y aplícalo como si estuvieras cardando las pestañas. El efecto voluminizador que consigue es increíble".
Efecto labio mordido
Nerina nos explica el paso a paso del efecto labio mordido, utilizando el Le Rouge Interdit Cream Velvet de Givenchy en dos tonos: "Comienza con el tono más claro, un nude rosado intenso con subtono rojizo. Úsalo para perfilar tanto tu labio superior como el inferior. La forma del aplicador de alta precisión hará que no necesites lápiz delineador adicional.
Seguidamente, rellena el interior de tus labios con el tono más oscuro, utilizando la parte curva del aplicador. Este tono morado frío, con subtonos rosas oscuros, proporcionará profundidad y contraste.
Al igual que en la técnica anterior, toca tus labios entre sí o difumina la intersección entre ambos colores con una brocha pequeña para obtener un look perfectamente integrado", concluye la experta.
El fijador
Para que el maquillaje aguante, recuerda la importancia del uso de un buen fijador: "Como cualquier cosmético, deberás elegir el más conveniente para tu piel o para el efecto que quieras conseguir. Pero lo más sorprendente es que este nuevo imprescindible de belleza no solo cumple la primordial función de fijar", apuntan los expertos de Primor.
Concluyen: "Además, algunos consiguen hidratar tu rostro, aportar una luminosidad natural o servir como una bruma refrescante tan placentera cuando lleguen días de calor. Estas propiedades hidratantes con las que cuentan mantienen tu piel jugosa y te aseguran que la base del maquillaje no se reseque y cuartee a lo largo que pasan las horas".