El cabello forma parte de esos aspectos estéticos por los que más nos preocupamos. No tiene un motivo científico, pero la gran mayoría de personas podrán corroborar que si el pelo está mal, no hay nada que podamos hacer. No importa la ropa, el maquillaje o la actitud de ese día, por lo general, la melena nos condiciona el atuendo completo.
Nos esforzamos constantemente por tenerlo bien. Probamos todo tipo de productos, aceite para las puntas, exfoliante capilar para el cuero cabelludo, evitamos las planchas para no quemarlo, pero nos hacemos los mejores peinados para los eventos especiales. Ya no solo las mujeres, los hombres también se preocupan por cada mechón irregular que cae por su frente.
Sin embargo, ellos suelen tenerlo más fácil. No tienen tanta preocupación a la hora de lidiar con la lluvia, los enredos, las puntas abiertas, canas, mechas o el tedioso encrespamiento, que siempre está ahí. Ya no depende de lo mucho que miremos el tiempo, son muchos los factores que pueden provocarlo y que es tarde cuando queremos arreglarlo.
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Por lo general, cuando estamos en la calle no tenemos todos esos productos milagrosos que acabarían con ello en ese preciso instante, por ese motivo siempre debemos prevenir. Para ello, existen en el mercado centenares de productos que pueden crear una capa protectora en nuestra melena, que eviten que se deshidrate; sin embargo, encontrar el perfecto se hace una tarea ardua con el paso del tiempo.
Los remedios naturales se inventaron cuando la sociedad no tenía a su disposición todos estos avances y productos milagrosos. Y aunque ahora si los tengamos, muchas personas siguen priorizándolos antes que todos ellos. Evitan que nuestro pelo se dañe y, por lo general, son ingredientes o productos que tenemos al alcance de la mano, como el aceite de oliva, que es indispensable en todas las casas de España.
El sencillo truco del aceite de oliva para eliminar el encrespamiento
El aceite de oliva es un secreto de belleza de millones de personas. Sus propiedades en la piel son muy conocidas alrededor del mundo. Gracias a sus antioxidantes, que combaten los radicales libres, sus propiedades nutritivas y su capacidad de hidratación, se ha convertido en un básico de neceser. Sus beneficios son tantos, que es un ingrediente común en la formulación de diversos productos dermatológicos.
Sin embargo, sus características no se quedan tan solo en el cuidado de la piel, y es que es un excelente tratamiento para el cabello. Entre sus beneficios, los más evidentes son que aporta brillo y suavidad a toda la melena, por lo que consigue esa estética que buscamos en otros productos en tan solo unos segundos.
Además, el aceite de oliva colabora en la reparación del pelo. Su alto contenido en vitaminas A y E, lo fortalecen y consiguen que esté mucho menos quebradizo de lo habitual. Añadido a ello, su carga de antioxidantes lo protegen de las agresiones externas, en particular del sol, por lo que también se convierte en una magnífica opción para los días calurosos y de playa que nuestra melena necesita más tratamiento.
Por otro lado, este ingrediente ayuda a nutrir, reparar el cuero cabelludo y proteger los folículos gracias a su composición natural. Entre ella, podemos encontrar los ácidos grasos monoinsaturados, que hidratan el cabello y convierten al aceite de oliva en un aliado contra las puntas abiertas y rotas.
Como ya hemos comentado, uno de los aspectos que más nos preocupan de nuestra melena es el famoso encrespamiento, cuando nuestro pelo se deshidrata, se abre y trata de expandirse para obtener toda la humedad en el ambiente. Se vuelve rebelde, imposible de controlar y coge un aspecto apagado y mate.
Si nuestro pelo tiende a encresparse, el aceite de oliva ayudará a las fibras capilares a retener la humedad. Esto puede ser especialmente útil en cabellos rizados, pero también para los cueros cabelludos irritados o con picazón, calmándolos y mejorando la sensación.
¿Cómo utilizar el aceite de oliva para el cabello?
Es muy fácil obtener todos estos beneficios del aceite de oliva y, al ser un ingrediente tan versátil y que combina bien con prácticamente todo, se puede incluso mezclar con nuestra mascarilla favorita y obtener los nutrientes duplicados. Lo aplicaremos directamente en el cabello y, dejándolo reposar, podremos conseguir un aspecto mejorado de nuestro pelo.
Sin embargo, una de las formas más efectivas para conseguir una hidratación profunda es aplicar aceite de oliva virgen extra directamente sobre el cuero cabelludo, hasta la raíz. Es importante saber qué tipo de pelo tenemos, puesto que si es graso, es mejor distribuirlo desde la zona media hasta las puntas, para no añadir sebo a la zona donde más se acumula.
Tendremos que dejarlo actuar menos media hora, aunque conseguiremos resultados más potentes si lo dejamos reposar toda la noche, como una mascarilla capilar tradicional. Cuando haya pasado el tiempo, vamos a aclarar en una ducha con agua tibia y nuestros productos habituales. Es posible que necesitemos dos o tres lavados para eliminar por completo el aceite, ya que resulta fundamental que no queden residuos.