Una mujer, posando.

Una mujer, posando. Istock

Belleza

Depilación con láser: ¿terminan los repasos alguna vez? Una experta responde

La doctora Estefanía Arredondo nos explica las claves de este método de depilación que convence a cada más hombres y mujeres.

30 mayo, 2023 01:56

Método de depilación plebiscitado en los últimos años, el láser genera, sin embargo, numerosas dudas. ¿Funciona de verdad? ¿Es seguro? Y sobre todo, ¿permite acabar con los pelos de forma definitiva?

[Rasurarse antes de la depilación láser: por qué debes hacerlo y con qué]

La doctora Estefanía Arredondo, directora médica de Olyan farma, despeja algunas incógnitas habituales sobre este tratamiento que ha revolucionado la rutina de belleza de millones de personas.

¿En qué consiste concretamente la depilación con láser?

La depilación con láser consiste en eliminar el pelo de la raíz del folículo piloso, a través de un rayo concentrado de luz que es absorbido por la melanina, y se convierte en calor que daña el folículo piloso (el lugar donde se forma y se encuentra el pelo).

¿Terminan los repasos alguna vez? ¿O siempre vuelve a crecer el pelo?

A medida que se van realizando las sesiones de láser, el crecimiento del pelo se va enlenteciendo, y se reduce la cantidad y el grosor. Una vez finalizado el tratamiento, se suelen recomendar sesiones de repaso semestrales o anuales, pues el crecimiento del pelo tiene mucho que ver con los cambios hormonales que se pueden dar a lo largo de la vida (en las mujeres, especialmente en el embarazo y la menopausia). También son importantes porque, teniendo en cuenta que el ciclo vital del pelo tiene tres fases consecutivas y cíclicas (anágena o de crecimiento, catágena o de reposo y telógena o de caída), que se van repitiendo sucesivamente en cada folículo piloso, pero que no tienen por qué acontecer a la vez para cada folículo, las sesiones de repaso ayudan a ir eliminando los pelos que se encuentran en la fase anágena.

Es bastante habitual que con el paso del tiempo vuelva a salir algún pelo, aunque, este suele ser más fino (vello), y estará en una cantidad muy inferior a la inicial. De no hacer los repasos, casi con total seguridad, ese vello irá creciendo. El momento de finalizar los repasos depende de los resultados obtenidos en función de las características individuales y de las preferencias propias, pues las expectativas y deseos de cada persona pueden ser muy diferentes.

¿Puede tener efectos secundarios? ¿Es normal que duela?

Los efectos secundarios más comunes son la irritación local de la piel circundante tras la sesión de depilación, que puede producir molestias, y los cambios en el color de la piel, especialmente en las personas que no siguen las recomendaciones dadas para los días de antes y después de las sesiones (se recomienda evitar la exposición solar para evitar quemaduras, usar protectores solares, y se desaconseja totalmente la exposición a cabinas de rayos UVA). Además, también se pueden producir reacciones cutáneas secundarias a estar tomando fármacos que produzcan fotosensibilidad por lo que también será importante evitarlos y advertir a los profesionales de cualquier medicamento que esté tomando o haya tomado en los días previos a la sesión.

Es normal que la depilación láser produzca molestias tipo pinchazo o quemazón y, dependiendo del umbral de dolor de cada persona, de la potencia utilizada y de la zona en la que se aplique, puede molestar más o menos a cada persona. En las personas que tengan un umbral de dolor bajo o se use en zonas sensibles, se puede recomendar la aplicación de una crema anestésica media hora antes de la sesión para reducir las molestias que puedan aparecer.

¿Es totalmente seguro para la piel?

Sí. Usado con precaución, en centros especializados, seguros, bajo seguimiento médico y teniendo en consideración todas las recomendaciones profesionales antes de comenzar el tratamiento, es seguro para la piel.

¿Se puede realizar en verano?

No hay una contraindicación como tal para realizarse la depilación láser en verano, pues todo depende de las actividades que haga la persona. Siempre y cuando no se esté expuesto al sol sobre todo en las zonas en las que se esté realizando el tratamiento tanto unos días antes como unos días después de las sesiones, para evitar que aparezcan efectos secundarios como la irritación, las quemaduras o los cambios en el color de la piel circundante, se podría continuar con las sesiones.

Lo que es fundamental siempre, pero sobre todo en verano y si estás realizándote depilación con láser, es utilizar barreras protectoras y una crema con factor de protección solar elevado y filtros frente a la radiación UVA.

¿Es verdad que no funciona con todos los fototipos?

No. Lo que es verdad es que es más eficaz en personas con fototipos de piel clara y pelo oscuro. Esto ocurre porque la absorción de melanina es mayor en el folículo del pelo oscuro, y menor en la piel clara, con lo cual la diana terapéutica será mejor que en el caso de personas con el pelo claro y la piel oscura, pero, no por ello, quiere decir que no vaya a funcionar en estas personas. Lo que sí es probable es que se necesiten más sesiones de láser en estas personas para conseguir resultados parecidos.

¿Qué consejo daría antes de lanzarse?

Antes de inclinarse por la depilación láser, creo importante que se elija bien el centro donde hacerlo, que debe ser especializado y que cuente tanto con la licencia sanitaria necesaria como con los profesionales adecuados. Los profesionales deben valorar de manera individualizada a cada persona y determinar el tratamiento más adecuado dependiendo del tipo de piel, el tipo de pelo y los antecedentes médicos. 

También creo importante elegir bien el momento del año en el que comenzar a realizar las sesiones, pues es preferible comenzar, en general, después del verano, aunque, por supuesto, depende de la exposición solar y de las actividades que realice cada persona a lo largo de todo el año. Durante todo el año, pero, sobre todo en los meses estivales, es superimportante la fotoprotección solar diaria. Y también hay que tener en cuenta que las sesiones, para que sean efectivas, deben realizarse con regularidad y, por tanto, contar con el tiempo necesario.