La temporada invernal tiene repercursiones directas sobre nuestro cuerpo: la piel es más sensible, al igual que el pelo y las uñas. "Hay que tener en cuenta que nuestro cuerpo está acostumbrado a funcionar cuando cuenta con una temperatura de unos 37º C. Si  por el contrario estamos demasiado tiempo expuestos a entornos demasiado fríos, esto hará que nuestros vasos sanguíneos se estrechen, dificultando el correcto flujo de la sangre. Cuando esto ocurre, podemos llegar a ver signos de deshidratación, irritación, pérdida de elasticidad, picor y grietas en la piel" explican los expertos de Dorphin.

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¿Cómo cuidar específicamente nuestras manos y uñas? ¿Cómo conseguir que el esmalte aguante más? ¿Cómo reforzar la zona? Dos expertas resuelven algunas de nuestras dudas más recurrentes.

¿Las uñas sufren más con el frío? ¿Cómo cuidarlas?

“Totalmente, la calefacción en interiores y el hecho de llevar guantes o sobre todo en pies, con calcetines y botas constantemente, hace que las uñas se sequen en exceso y puedan romperse o adquirir un aspecto poco saludable.

Una solución está en hidratarlas y nutrirlas con productos enriquecidos en calcio, así como darnos masajitos con aceite de oliva en la parte cuticular y también, cremas protectoras y fortalecedoras sobre todo durante la noche, cuando mejor actúan sus principios activos.

La manteca de karité viene muy bien para combatir la sequedad, pero hay que prestar atención a los problemas de hongos e infecciones bacterianas antes que se den” explica Monique Aguilar, manicurista oficial de ORLY Spain, Andorra & Portugal.

¿Es necesario dejar "descansar" las uñas y no llevar esmalte durante una temporada? 

“Realmente en esta época del año no sería necesario, es momento de lucir unas uñas espectaculares con los colores de la temporada en comidas con amigos, familiares o cenas que por Navidades, hacemos todas en el trabajo, salvo que se trate de un caso excepcional, claro.

De todas formas, en los centros de belleza también tratamos estos problemas al tiempo que las embellecemos, no es incompatible” apunta Andrea Serrano, directora de Mangata, centro de belleza y medicina estética en Calle Víctor Andrés Belaunde, 6 en El Viso, Madrid.

¿Cómo conseguir que el esmalte aguante más?

“Por ejemplo, empezando primero con la uña, usando fortalecedores y bases de calcio o acudir a un centro donde las cuiden y sanen gracias por ejemplo a las manicuras y pedicuras spa, donde se ablanda toda la piel de alrededor y así se limpian mejor tanto las durezas como las cutículas.

En cuanto a la duración del esmalte, el uso de topcoats es fundamental ya que tiene una función protectora. También, comprar lacas de uñas de calidad y no exponerlas demasiado a agentes agresivos de limpieza o químicos” subraya Andrea Serrano.

¿En qué consiste la manicura rusa?

“Básicamente, dejar a la uña sin cutícula para que parezca más lento su crecimiento y el efecto se prolongue más, esmaltando siempre muy cerca de la piel. No conviene hacérsela una misma en casa porque tiene sus riesgos, es mejor acudir a un centro especializado.

Para realizarla, primero hay que deshidratar la uña y echar mano de un buen aceite para cutículas, una base, un top coat y por último, el esmalte elegido. Para eliminar la cutícula, un buen removedor también ayuda” comenta Monique Aguilar.

¿Qué diferencia la manicura permanente de la semipermanente? ¿Cuánto duran? ¿Pueden dañar la uña natural?

“No, no dañan la uña natural y la diferencia radica en la mejora de los productos utilizados, es decir, la semipermanente es una versión mejorada de la permanente. Además, la permanente se hace con uñas de gel. La semi, dura más tiempo y su secado es prácticamente en el momento” explica Monique Aguilar-

¿Cómo reforzar la uña natural?

“Claro que se puede cambiar, pero para eso es esencial tener unas uñas largas para poder trabajarlas bien. Si tus manos son pequeñas y finas, lo que más te favorece visualmente son las formas redondas, ovaladas o en forma de almendra, que es la más versátil y cómoda.

Para conseguirla, se recomienda una lima de 180/240 grits, un grano que no es agresivo y que evitará debilitar las uñas, vigilando el largo entre 3-5 milímetros, suficientes para dar una bonita y elegante forma. Para manos más grandes con uñas ya sean anchas o estrechas, la forma más favorecedora es la semicuadrada, redonda o coffin. También los dedos ayudan a adivinar qué tipo de forma es el más adecuado.

Si para unos dedos gruesos o gorditos lo mejor son las uñas ovaladas, para unos dedos delgados lo más indicado son unas uñas cuadradas en forma recta, manera de estilizar aún más la mano.

Sobre reforzar la uña natural, primero aconsejamos usar quitaesmaltes sin acetonas para no dañarlas al retirar la laca y después, usar productos que las protejan a ser posible, lo más naturales que se puedan, por ejemplo con aceites esenciales. También recomendamos fortalecedores y productos con vitaminas para que estén bien nutridas” añade Monique Aguilar.