¿Sabías que pasamos casi un tercio de la vida durmiendo? Durante esas horas de descanso nuestro cuerpo y organismo experimentan algunos de los beneficios de dormir bien como el fortalecimiento de las conexiones neuronales, el fortalecimiento del corazón, facilitamos la producción de hormonas como la melanina y la serotonina, incrementamos la creatividad y hasta incluso ayudamos al cuerpo a quemar calorías.
Pero si por el contrario, eres de las que duermen poco, deberías saber que cuando te privas del sueño se estima que el 25% de las células cerebrales mueren, además de que se interrumpen procesos y acciones que realizan muchas hormonas.
Y a todo ello hay que unirle el hecho de que una mala calidad de sueño está además estrechamente relacionada con los problemas crónicos de la piel y con su envejecimiento prematuro.
Y es que, al igual que existen las arrugas provocadas por el paso del tiempo, también existen arrugas del sueño y estas no son otras que las provocadas por las posturas que adquirimos mientras dormimos.
La razón de su aparición, tiene que ver con que podemos pasar muchas horas en una misma postura mientras dormimos o por ejemplo cuando apoyamos el rostro al dormir siempre en el mismo lateral.
Arrugas del sueño que aparecen por esa fricción de la almohada durante largas horas y que a continuación te contamos cómo evitar. Toma nota.
¿Cómo evitar las arrugas al dormir?
Antes de darte todos los tips para evitar la aparición de las arrugas al dormir, es importante que entiendas por qué se producen sobre todo en la zona del rostro y del escote.
Es precisamente en estas zonas más afectadas en las que se reduce el aporte de oxígeno que llega a esa zona de la piel debido a la fricción y comprensión del rostro que dificulta la microcirculación.
A esto sumamos que a partir de los 30 o 35 años la piel también comienza a experimentar una reducción en la formación de colágeno y ácido hialurónico, lo cual además causa un afinamiento del grosor de la piel.
Precisamente para evitar que esa postura a la hora de dormir enfatice las líneas de expresión y las arrugas, aquí te compartimos algunos consejos con los que podrás combatir la aparición de las arrugas mientras duermes.
-
Intenta dormir boca arriba: Dormir de lado o boca abajo y con la cara aplastada contra la almohada están sin duda entre las peores posiciones para quienes les preocupa acelerar el envejecimiento prematuro de la piel mientras duermen.
Precisamente una de las mejores maneras de evitar las arrugas provocadas por el sueño es dormir boca arriba, evitando precisamente ese contacto facial con las almohadas. Esta postura también permite que la piel se drene de forma más eficaz y evitará por lo tanto que te despiertes con el rostro hinchado.
-
Mejora la calidad del sueño: De poco te servirá adoptar una buena postura para dormir si no consigues un buen descanso, y es que es precisamente mientras dormimos cuando se potencia la capacidad restauradora de la piel.
A esto hay que sumarle que la falta de sueño acelera además la glicación (proceso que favorece el envejecimiento de la piel). Así que te animamos a recurrir a alguno de esos 7 superalimentos que te ayudarán a dormir mejor, a la conocida técnica de respiración 4-7-8, a que hagas uso de la música relajante o incluso a la meditación para conseguirlo.
-
Entrena tu rostro con ejercicios faciales: Entrenar el rostro a través de ejercicios faciales también te será de gran ayuda para combatir la pérdida de firmeza y la aparición de arrugas y líneas de expresión.
Una buena forma de combatir ese envejecimiento prematuro puede ser haciendo uso de los beneficios del yoga facial. Una disciplina que combina movimientos faciales y expresiones con las que fortalecer y ejercitar los músculos de la cara y con la que podrás prevenir la pérdida de firmeza, la aparición temprana de arrugas o la flacidez de forma natural.
-
Mima la piel antes de dormir: Si lo que quieres es huir de ese envejecimiento prematuro y lucir un cutis radiante y joven, entonces nada mejor que procurar una buena hidratación de la piel antes de dormir.
Ayúdate de cremas hidratantes, de una buena limpieza facial, de serums, aceites y máscaras antioxidantes que puedan garantizarte un extra de ayuda durante el proceso de regeneración celular que la piel experimenta mientras duermes.
-
Funda de almohada de seda: Reconocemos que cambiar el algodón por la seda implica hacer una pequeña inversión de dinero, pero te aseguramos que el cambio merecerá la pena.
Y es que, mientras el algodón es un tejido natural que generalmente crea arrugas y dobleces y que al contacto con la cara puede dejar marcas, esto no sucede con la seda. Con la seda no solo podrás prevenir la aparición de arrugas, sino que además podrás evitar el encrespamiento del pelo y las puntas abiertas.