La década de los 90 comenzó con el lanzamiento de Nevermind (1991), de Nirvana. Un disco que haría historia musical y representaría a un movimiento, el grunge, que, pese a su marcado carácter outsider, acabó dictando tendencias en el mundo de la moda.
Para quienes nacieron en los 70, es la década prodigiosa y, ahora, vuelve, al menos en cuanto al maquillaje. No hay más que ver la colección que ha lanzado MAC X Stranger Things, una simbiosis perfecta entre la cosmética y la serie más vista de 2022.
Respecto al maquillaje, en los noventa se vivieron dos etapas muy marcadas. Durante la primera mitad, con el grunge como inspiración, se apostó por un estilo natural; mientras, en la segunda parte, fueron ganando espacio los brillos y la sofisticación.
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“Podríamos decir que la década de los 90 fue una de las más eclécticas respecto al maquillaje. Los 80 marcaron este universo al mismo ritmo creativo que la moda, la música y el arte, dejando como herencia a los años 90 toda una explosión de color, formas y estilos”, apunta Junior Cedeño, maquillador internacional de Dior.
Una década dividida en tres
Según Cedeño, respecto al maquillaje, los 90 se dividen en tres etapas. “La primera sería esa herencia de los 80, en la que se conservan diferentes aspectos de la década anterior como el uso de un perfilador de labios más oscuro que la barra, pieles ultra mates, mejillas marcadas y bronceados imposibles”.
Posteriormente, llegó el minimalismo como una tendencia muy poderosa. “Empezamos a ver maquillajes ultra naturales de la mano de grandes campañas de publicidad como Calvin Klein, Donna Karan y Benetton, donde prevalecía la belleza natural sin exagerar los rasgos faciales”, destaca el experto de Dior.
Para lograrlo, los productos esenciales hoy serían “ los correctores iluminadores y las bases de maquillaje con acabado nude” y quienes mejor lo representan son “top models de la época como Kate Moss , Christy Turlington Y Eva Herzigova”.
A la tercera época de los 90, Cedeño la califica como la fashion victim. “Aparecen en el panorama de la moda diseñadores como Alexander McQueen, Christian Lacroix y John Galliano, que en sus pasarelas devuelven todo el protagonismo al maquillaje llegando a la puesta en escena teatral y ultra plástica”, explica el artista, que señala que la moda realizó una simbiosis con la escena musical.
Así, los grandes diseñadores “bebieron grandes referentes de la música como Lady Gaga, Madonna o Britney Spears, transmitiendo a sus seguidores esta adicción por el universo fashion”. Sin embargo, de esos tres estilos, el que considera más representativo de los 90 en maquillaje es “el minimalismo que, además es el que prevalece hasta hoy”.
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Marcar tu propia personalidad
Pero, además, los 90 destacaron porque marcar tu propia personalidad era la mayor tendencia. “Seguir la propia inspiración”, apunta Carla Nieto, experta make up, ganadora del concurso Tattoo pencil liner de KVD Beauty, que señala que supusieron “un cambio radical”. Se perseguía la naturalidad por encima de todo y se dejaba de lado “la extravagancia de los 80, para abrir paso a looks más inspirados en la música, enfatizando la belleza natural y con más simplicidad”.
En maquillaje, eso se traducía en una “absoluta sencillez, dejando de lado la ostentación. Pieles muy naturales con la base del tono exacto y/o bronceadas, contorno o colorete para marcar el pómulo, pero en colores discretos solo para definir el rostro. Ojos monocromos con tonos tierra o pastel, profundidad en la mirada y máscara de pestañas”, explica la experta.
Si en estos momentos, cualquier look de maquillaje marca, por encima de todo, las cejas, estas en los 90 eran, sin embargo, “finas y algo más redondas, pero no muy marcadas”, subraya Nieto, para quien “el protagonismo de esta década eran los labios y la tendencia perfilador y brillo, el rey indiscutible el gloss. El abanico de tonos tierra para labios tampoco se quedó atrás.”
Los 90 en la actualidad
Para recrear el maquillaje de los 90, pero adecuándolo a estos tiempos, Nieto sugiere usar “delineados para enmarcar la mirada, incluso en la línea de agua y lagrimal o rescatando sombras azul y rosa pastel, que se usaron mucho en los noventa para dar luz a la mirada, o con azul más oscuro o marino pero monocromo”.
Además, la experta anima a “contornear la cuenca de tu ojo con el mismo bronceador que usas para el rostro. Eso sí, utiliza un solo estilo en la mirada, no mezcles. También puedes ponerte labiales en tonos marrones y labios perfilados más oscuros coronados de brillo intenso, el gloss es tu bff. Si a todo esto, le sumas un moño algo más bajo, con unos mechones gruesos sueltos delante, ya tienes un look de los noventa, pero actual y muy llevable. Rosalía, Dua Lipa o Bella Hadid podrían ser ejemplos actuales de esta tendencia.”
Cómo maquillarte
Para lograr un look de los 90, sin olvidar que estamos en 2022, hay que tener en cuenta qué se llevaba entonces, y traerlo al siglo XXI.
1) Piel 'nude'
Si algo es clave respecto al maquillaje de los 90, la clave está en la piel, a la que se comienza a adjetivar como nude, desnuda, mate y perfecta. Para conseguirla, es fundamental “elegir una base de maquillaje natural y de larga duración, siempre aplicada del centro del rostro hacia el exterior para crear un efecto fresco y ultra natural”, resalta Junio Cedeño, algo que puedes conseguir con la base de maquillaje Dior Forever en versión mate –también la también la hay efecto glow– que, además, dura todo el día, incluso si te vas de fiesta tras el trabajo.
Por su parte, Blanca Gallego, directora de comunicación de Kiko Milano España y Portugal, sugiere “utilizar una base de tu mismo tono de piel”. Una opción sería Full Coverage 2-In-1 Foundation & Concealer, de Kiko Milano, “que, al ser base y corrector, permite unificar la piel con un solo producto”. Otra opción puede ser la Base de maquillaje Sérum Accord Parfait, de L'Oréal Paris, cubriente, pero ligera.
2) Ojos: juego de sombras
En la búsqueda de un maquillaje minimal, en los 90 el nude también se aplicaba al maquillaje de ojos. Eso se traducía en que las sombras elegidas eran, sobre todo, tonos marrones, melocotones e incluso grises –cuando se pretendía lograr un efecto ahumado–.
Además de ser tan bonita como un clutch, la paleta Le Smokey Eye Radiant Nude, de YSL Beauté, con sombras en acabados mate, satinado y brillante, es un ejemplo perfecto de los colores más buscados en los noventa, ya que en ella se combinan los tonos tierra y pieles, cálidos, para el día, con algunos metalizados para lograr un toque de brillo ahumado por la noche.
Otra buena opción sería la Paleta Hawkins M•A•C X Stranger Things, perfecta para las más jóvenes, se trata de una colección de sombras que permite recrear las que se usaban en los 90, pero además rinde homenaje a la serie del año; los colores no pueden ser más bonitos.
Y, si lo que quieres es tener mucho dónde elegir, puedes optar por la Paleta de sombras Eye Go Wild, de L'Oréal Paris: 16 sombras en tonos cálidos y tierras, muy pigmentadas y perfectas para lograr un perfecto make-up vintage.
Pero si lo que quieres es destacar tu mirada como se hacía en los 90, prueba a maquillar tus ojos con el MAC Colour Excess Gel Pencil Eye Liner, en su tono Perpetual Shock, un lápiz en gel resistente al agua e hiper pigmentado, muy suave lo que facilita su uso; con su tono azul eléctrico, conseguirás el look noventero perfecto.
Acaba con la Máscara Volume Effet Faux Cils, de YSL Beauté, para triplicar el volumen de las pestañas gracias a sus tres capas, una envolvente, otra acondicionadora para promover su rizo y una tercera que mantiene la intensidad del color.
3) Cejas sutiles
¿Serás capaz de renunciar a tus súper cejas pobladas? Quizá para este punto no estemos tan preparadas. Eso sí, en los 90, las cejas tenía poco protagonismo. Tanto, que muchas no pudieron recuperarlas al depilarlas demasiado. Mejor optar por un punto intermedio, y nunca depilarlas demasiado finas, ya que podría no volver a crecer el pelo. “Las cejas se corrigen, pero sin exagerar la forma ni aportar exceso de color o textura”, recomienda Cedeño.
4) A todo corrector
Si hubo un producto de maquillaje que triunfó en los 90 y nos enamoró, ese fue Touche Éclat, de YSL. Se lanzó en 1992 y, en poco tiempo, todo el mundo estaba ahorrando para poderlo llevar en el bolso (y aún seguimos con el idilio). Y es que los 90 fueron los años en los que aprendimos a iluminar nuestros rostros, al tiempo que descubríamos cómo hacerlo podía cambiar una cara gris por otra de cine.
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Correctores e iluminadores siguen estando de moda, tanto que por ejemplo, el lanzamiento de Good Apple Skin-Perfecting Foundation Balm, de KVD Beauty, se convirtió en una exitazo en TikTok, donde los usuarios lo lanzaron al éxito. Además de corregir imperfecciones y de ser vegano, logra que te sientas como si no lo llevaras.
5) Bronceado sin sol
Otro de los imprescindibles en los 90, si te gusta el look playero, son los polvos de bronceado, una manera super sana de tener buena cara sin pasarte horas al sol. Lo puedes lograr con los nuevos Terracotta Light de Guerlain; una sugerencia, aplícalos con efecto bonne mine –o piel saludable–, dibujando una W en tu rostro: dibuja una curva descendente desde la sien hasta debajo del pómulo, luego sube hasta el entrecejo y repite en el otro lado de tu cara. La idea es hacer una W. No olvides difuminar los restos con la brocha adecuada.
6) Labios, perfilados y mate
Si piensas en unos labios de los 90, lo primero que te viene a la cabeza es el perfilador, que se usaba algo más oscuro que la barra de labios. En su versión 2022, no hay que resaltar tanto la diferencia de tono entre ambos, pero sí dejarlos bien delineados.
Lo conseguirás con el lápiz Le Stylo Lèvres, de Guerlain, un perfilador de labios duradero de alta precisión, de punta suave para evitar dañar la sensible piel de los labios, mejora la adherencia de la barra de labios con un acabado mate. Para rellenarlo, son perfectos los nuevos Powder Kiss Velvet Blur, de MAC, con una amplia gama de preciosos tonos tierra y nude, y acabado matificado, que deja la boca suave como el terciopelo.
7) Labios ombré, la opción ‘glossy’
Si prefieres una opción más brillante para tus labios, puedes probar con la técnica ombré, que se convirtió en una de las más usadas en los 90. La reina ombré fue la top Naomi Campbell.
La técnica consiste en sombrear los labios de manera que simulen un efecto 3D. El truco está en maquillarlos en varias tonalidades para acabar con una capa de gloss. El resultado es una boca muy jugosa y con mucho volumen, cual hermana Kardashian.
Lo puedes lograr con Everlasting Liquid Lipstick, de KVD Beauty, un labial líquido mate con pigmentos de larga duración, que puedes acabar con un toque glossy. Y si lo que buscas es combinar un brillo extraordinario con una hidratación profunda, prueba lo nuevo de Guerlain: KissKiss Bee Glow, un bálsamo para la boca con color, infundido con miel y un 98 % de ingredientes de origen natural; sin duda, el labial más goloso del mercado. Si lo prefieres de larga duración, el brillo de labios Camaleon Metallic Gloss Nacar, que aporta un acabado jugoso que dura hasta diez horas y que, gracias a sus partículas iridiscentes, le dará aún más volumen a tu boca.