Ni Casares ni Tolox: las aguas termales de origen romano y gratuitas más increíbles del sur de España
Este balneario, enclavado en un espacio único, es lugar de peregrinación para los amantes de las aguas medicinales.
22 agosto, 2024 12:33Las posibilidades turísticas que abarca España van mucho más allá de ir a la playa en verano. Evidentemente, la belleza de nuestras costas conquista a cualquiera, pero, por suerte, existen más espacios naturales espectaculares y perfectos para darse un baño y no necesariamente de agua salada.
Málaga es conocida por tener una de las costas más aclamadas a nivel nacional e internacional, pero también su interior es una joya para los amantes de la naturaleza y las aguas termales. Precisamente en la comarca de La Axarquía Costa del Sol, podrás descubrir un pequeño paraíso que combina historia, naturaleza y salud.
Los Baños de Vilo, pertenecientes al municipio de Periana, son el destino perfecto para aquellos que buscan las propiedades de aguas medicinales, además de relajarse y disfrutar. Un edén gratuito, conocido desde época romana, que se presenta como una de las mejores alternativas de ocio de la provincia.
Las aguas de esta piscina termal son sulfhídricas, magnésico-cálcicas y nitrogenadas, aunque lo mejor que tiene es su constante temperatura de 21ºC. Son muchos los que aquí acuden para tratar enfermedades óseas o dermatológicas, pero también para mejorar la circulación sanguínea, aliviar dolores musculares o para beneficiarse de sus propiedades antioxidantes.
El conjunto de beneficios de los Baños de Vilo, sumado a la belleza natural que lo rodea, hacen de estas aguas medicinales un lugar perfecto para relajarse, disfrutar y extraer todos sus beneficios de la mejor manera.
Historia de los Baños de Vilo
Visitar esta piscina termal es viajar en el tiempo. Su construcción se remonta a la época romana, cuando este tipo de aguas medicinales gozaban de una gran popularidad gracias a sus propiedades curativas y su importancia social.
Siglos más tardes, durante la dominación musulmana en la Península, los Baños de Vilo fueron reconstruidos y utilizados para la purificación de los creyentes antes de las oraciones, como símbolo de prosperidad.
En el siglo XVIII, esta piscina termal se hizo popular por tratar afecciones cutáneas, sin embargo, en 1907, una tormenta destruyó parte de las instalaciones, afectando a su turismo medicinal.
Ya en la década de los 90, el ayuntamiento de Periana se hizo con la propiedad y lo restauró, haciendo posible que a día de hoy se pueda disfrutar como uno de los balnearios más especiales del sur del país.
Características de los Baños de Vilo
Se encuentran a la derecha del arroyo de Guaro, a pocos kilómetros de Periana, al norte de la carretera Periana-Riogrodo, en la cortijada de Baños de Vilo. El hecho de que sus aguas, procedentes del arroyo de Guaro, estén continuamente renovándose, hace que se trate de un lugar privilegiado de la naturaleza.
Los baños termales, originalmente, se componían de dos piletas de agua fría, separadas para hombres y mujeres, aunque en la actualidad tan solo queda una de ellas. En el complejo también puedes encontrar dos piletas, una de agua templada y otra de agua caliente, perfectas para favorecer la circulación de quienes en ellas se sumergen.
Más allá de ser una fuente de relajación, las aguas termales de los Baños de Vilo, suponen una serie de beneficios para la salud por las que cientos de personas acuden a ellos para tratar sus enfermedades con sus aguas minerales.
El azufre que contiene estas aguas, de ahí su fuerte olor que algunas personas pueden sentir, es conocido por su poder desintoxicante y antiséptico, idóneo para tratar enfermedades de la piel tipo dermatitis, psoriasis o eczemas.
Otra de las grandes propiedades de los Baños de Vilo son el alivio temporal que quienes aquí se bañan sienten en sus músculos y articulaciones. Sumergirse en sus aguas puede ayudar a reducir la inflamación y malestar que enfermedades como la artritis o las lesiones deportivas, por ejemplo, provocan.
Consejos para un baño termal
La duración ideal para beneficiarte de todas las propiedades de los Baños de Vilo (o de cualesquier otras aguas medicinales), es permanecer en la piscina entre 15 y 20 minutos.
Este tiempo es el que los expertos consideran suficiente para que el cuerpo absorba los minerales pero sin sobrecargar al sistema cardiovascular. Aunque puedes tomar varios baños en tu visita, asegúrate de tomar pequeños descansos antes de volver a sumergirte en las aguas termales.
Una de las características más llamativas de los Baños de Vilo es que son gratuitos, por lo que lo posiciona como el viaje perfecto para los amantes del turismo de balnearios.