El número de experiencias pasadas, la primera impresión... son solo algunos de los temas tabús en una pareja. Otro de los más habituales es el del dinero. La percepción de este último, sin embargo, está viviendo una transformación. Es lo que define el término infladating.
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Los datos lo corroboran: un estudio llevado a cabo por Bumble corrobora que hablar de la situación económica personal en una cita ya no es tabú. De hecho, esta investigación ha revelado que más de 1 de cada 3 (36%) de los españoles están dispuestos a hablar de dinero de forma natural en estos encuentros y esto sucede aún más entre las mujeres (41%) y la Generación X (40%).
Esta transparencia a la hora de hablar sobre finanzas en las citas ha llevado a un aumento de las "citas donde menos es más", es decir, citas con poco o ningún coste, lo que en última instancia hace que las personas se sientan más cómodas y con menos presión a la hora de quedar, ya que este tipo de citas ya no implica que te tengas que gastar mucho dinero, según explica la aplicación.
Esto es especialmente relevante, ya que 1 de cada 4 personas (28%) afirma que ha establecido ciertos límites financieros en torno a su vida sentimental. Pero, ¡ojo! esto no significa que tengamos menos citas, sino que el formato clásico de dating está cambiando. El estudio de Bumble indica que la mayoría (62%) de los españoles en la app están más interesados en una cita casual que en algo lujoso o caro. De hecho, en los últimos dos años, solo 1 de cada 5 (19%) dice que le impresionan las primeras citas lujosas, según recalca la app.
Alba Duran, directora de marketing de Bumble España, recalca: "No hay nada de malo en decir que tienes un presupuesto limitado, en sugerir que dividáis la cuenta u optar por una cita más discreta. Ser más transparente al hablar de dinero puede que ayude a tener una mejor cita, ya que te sentirás menos presionado a gastar por encima de tus posibilidades, y también entenderás si compartís los mismos valores cuando se trata de dinero y gastos".
¿Cómo gestionar las finanzas?
Los expertos de el banco online N26 dan cuatro consejos para ayudar a las parejas a tratar el tema de forma sencilla y eficaz:
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Conoce tus propios hábitos. Antes de abordar este tema, en primer lugar es necesario que cada miembro de la pareja analice y entienda la forma en la que gestiona el dinero a nivel individual para así comprender sus prácticas financieras, así como las necesidades y aspectos no negociables de los que no es consciente.
"No existe un único modo de abordar este tema entre parejas, ya que cada persona inicia la relación con sus propios hábitos de gestión del dinero. Por tanto, alinearlos o incluso discutirlos puede ser complicado y requerir trabajo y energía", señala Daniele Coda, director global de Marketing de Producto, Partnerships e Insights en N26.
De este modo, conocerá sus hábitos de gasto y ahorro y así sentará la base para mantener conversaciones sanas, sostenibles y constructivas sobre el dinero.
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Conversaciones de almohada. La digitalización y el cambio en la mentalidad de la sociedad han democratizado los conocimientos y habilidades financieras, por lo que cada vez más personas buscan sacar más partido a su dinero. Hablar de finanzas sigue considerándose tabú o motivo de discusión entre algunas parejas, lo que suele desembocar en falta de sinceridad. Las razones más frecuentes pueden ser la vergüenza o el miedo, pero también el desinterés y las diferentes opiniones sobre si se debe hablar de dinero.
"Aunque puede resultar incómodo y poco natural, es recomendable entablar conversaciones periódicas sobre el dinero, para así encontrar un terreno común y alinear los deseos, necesidades y expectativas de la situación financiera de la pareja", indica Coda.
Los gastos imprevistos encabezan la lista de motivos de conflicto entre la Generación Z y las parejas más jóvenes de la Generación Millenial; mientras que ocultar las deudas suele ser una señal de alarma para las parejas con más edad de la Generación Y, la Generación X y los Baby Boomer. Por supuesto, esto puede variar de una persona a otra, por lo que una comunicación transparente y honesta es la clave.
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Las parejas que ahorran juntas, permanecen juntas Ser completamente transparente sobre las propias finanzas puede resultar incómodo para muchas personas y encontrar la manera de entablar la primera conversación sobre el tema puede convertirse en un verdadero reto. Una buena forma de iniciar una comunicación abierta puede ser fijar un objetivo financiero común y hacer un seguimiento regular para evaluar el progreso.
Esto puede ser especialmente eficaz cuando los miembros de la pareja difieren en su forma de gastar y ahorrar ya que este objetivo o proyecto de ahorro común puede hacer que la conversación sea más tangible y real. De esta forma será más fácil entablar una conversación más natural, ya que todos los implicados tendrán toda la información de forma transparente.
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Que la tecnología te acompañe. Además de la importancia de una comunicación honesta y transparente en torno a las finanzas, el dinero no debe regir todos los aspectos del día a día de una pareja, ni tampoco la mayoría de sus conversaciones. Actualmente existen varias herramientas tecnológicas que permiten a la pareja despreocuparse de la gestión del ahorro y así reducir parte de la presión.
Sin embargo, hay parejas que desconocen su existencia, por lo que no saben cómo ahorrar, y eso es algo que suele provocar discusiones. Contar con herramientas de ahorro que aparten automáticamente un determinado porcentaje del salario puede ayudar a las personas a alcanzar sus objetivos de ahorro y, por lo tanto, a tener menos discusiones. No hay duda de que la gestión del dinero en las relaciones puede ser un verdadero reto.
Sin embargo, el proceso de dominarlo y celebrar juntos los éxitos puede hacer que las parejas se sientan más unidas y que aumente la armonía en la relación. Aunque conlleva una inversión de tiempo y esfuerzo, seguir unos sencillos pasos puede marcar una gran diferencia, tanto en San Valentín como cualquier otro día.