Era un secreto a voces y, finalmente, el Gobierno de Pedro Sánchez ha entonado su 'mea culpa'. En concreto ha sido la ministra de Industria, Reyes Maroto, quién ha reconocido, tal y como recoge la Agencia Efe, que el Plan Renove, de ayuda a la compra de vehículos nuevos, "no está obteniendo los resultados deseados".
Estas declaraciones se producen, además, cuando apenas quedan 20 días para que finalice el Plan Renove tal y como se acordó en su redacción. Desde que comenzaran estas ayudas y hasta la fecha se han consumido solo 30 de los 250 millones con los que está dotado. Esta cifra, por tanto, supone que se han gastado el 12% de los fondos aprobados.
Así lo ha declarado la ministra de Industria, Reyes Maroto, durante su comparecencia en la Comisión de Industria del Congreso, en la que ha subrayado la importancia de aprobar medidas para dar confianza a las familias y que estas puedan afrontar la compra de bienes duraderos.
"El plan, que atiende a la necesidad de estímulo de la demanda, no acaba de tener los resultados deseados por la pandemia y las limitaciones perimetrales de la movilidad", ha insistido Maroto.
Está, además, la particularidad el Plan Renove se redactó señalando en su normativa que las ayudas estarían disponibles hasta que se agotaran los fondos (que no ha ocurrido) o bien hasta el 31 de diciembre, que está a punto de llegar.
Esto significa, por tanto, que es más que probable que lleguemos al final de año y queden fondos de ayuda a la compra de coche sin asignar.
El sector, enfadado
"Se están riendo de nosotros", señalan a EL ESPAÑOL fuentes del sector que prefieren mantener el anonimato. "Ahora dicen que el dinero que sobre del Renove serán las compensaciones que el Gobierno dará al automóvil en 2021 con motivo de la entrada en vigor del WLTP y la subida del impuesto de matriculación", afirman estas mismas fuentes. "Este Gobierno confirma la hostilidad hacia el automóvil", afirma otro dirigente del sector.
Estos dirigentes hacen relación a las palabras de Reyes Maroto pronunciadas a finales de noviembre donde señalaba que es voluntad del Gobierno compensar la entrada en vigor del WLTP con otros instrumentos que permitan minimizar el impacto en el sector.
Según nos comentan estas fuentes, esta compensación a la que hace referencia el Gobierno es simplemente a permitir que el dinero sobrante del Plan Renove que no se haya gastado en 2020, se pueda gastar en 2021. Es decir, que el Plan Renove continúe en 2021 hasta que se acaben los fondos.
Precisamente en este sentido, desde el Gobierno señalan, en palabras de Maroto, que están "analizando distintas medidas", aunque sin detallarlas.
Suben de precio los coches
A este mal funcionamiento del Renove (se comunicó en verano, entró en vigor en octubre y el usuario tiene que realizar todo el papeleo con certificado digital) se suma la llegada de un nuevo nubarrón al automóvil, debido a la entrada en vigor del WLTP.
En concreto, desde el próximo 1 de enero cambia la forma en la que se miden los consumos de los coches y esto supondrá un salto de tramo de muchos coches (entre el 50% y el 70% según algunas organizaciones) en el impuesto de matriculación y un aumento de precio de muchos coches.
Así, una gran mayoría de modelos que antes no pagaban impuesto de matriculación por tener unas emisiones por debajo de los 120 gramos, ahora superarán esta cifra de CO2 y, por lo tanto, será un 5% más caro.
En este sentido, la ministra ha recordado que cuando llegó al Ejecutivo, en agosto de 2018, aprobó una moratoria para retrasar el impacto en precios de la entrada en vigor de la WLTP, a lo que ha añadido que en el Gobierno son "muy sensibles" al sector y están "preocupados" por el impacto que pudiera tener este cambio en las ventas.
Según las asociaciones del sector, Anfac (fabricantes), Faconauto (concesionarios) y Ganvam (distribuidores), la mitad de los vehículos verán incrementada su tributación en el momento de la compra, con una subida media del 5 %, y para evitarlo reclaman emular a países como Francia y Portugal, que modificaron los tramos del impuesto (elevando las emisiones permitidas).
En su opinión, de no modificarse en España el impuesto "la situación del sector empeorará, dificultando aún más la salida de la crisis, con el consecuente impacto en el empleo y en la economía del país".
En este sentido, numerosos dirigentes ya han señalado que esta medida supondrá una reducción del empleo tanto en las fábricas como en los concesionarios.