En la firma checa Skoda están de celebración, ya que estos días el buque insignia de la marca, el Superb, cumple nada más y nada menos que 15 años de éxito. El Superb lleva muchos años representando a Skoda en el segmento de las berlinas medias, superándose con cada generación para alcanzar a un público más amplio.
El Superb no es, no obstante, un lanzamiento del Siglo XXI. La historia de este modelo comenzó muchas décadas antes, concretamente en el año 1934, cuando Skoda lanzó por primera vez un coche con esta denominación. El Skoda 640 Superb se convirtió en el tope de gama de Skoda por aquel entonces, gracias a una gran carrocería y a un sedoso motor 2.5 de seis cilindros en línea.
Posteriormente esta denominación comercial cayó en desuso hasta su reimplantación en el año 2001, cuando Skoda decidió relanzar su imagen en el segmento de las berlinas ejecutivas, lanzando el Superb, una gran berlina construida sobre la plataforma alargada de modelos de la época como el Passat (3BG) o el Audi A6 (C5).
Con un diseño muy similar al del Passat de la época, el Superb ofrecía grandes cantidades de espacio y unas cotas de calidad muy superiores a lo que nos tenía acostumbrados Skoda por aquel entonces, todo ello aderezado con una carga tecnológica muy competente con elementos como ESP, faros de xenón, asientos eléctricos o navegador integrado.
Las siguientes generaciones ya contaron con un diseño más personal, sobre todo la última variante, lanzada al mercado en marzo de 2015, de la que ya se han vendido más de 100.000 unidades en todo el mundo. En total, desde su lanzamiento en 2001, la marca ha construido más de 900.000 unidades del Superb.
Este último Superb es el Skoda más avanzado de la historia. Construido sobre la plataforma modular MQB del Grupo Volkswagen, el Superb ha perdido elementos como los motores de V de las anteriores generaciones, pero ha ganado un equipamiento muy superior con sistemas de confort y seguridad nunca vistos en Skoda, así como una gran gama de motores con potencias que alcanzan los 280 CV.
El Superb mantiene la fórmula que tanto éxito le ha proporcionado en esta década y media, con un espacio interior a la altura de vehículos de un segmento superior, una amplia gama de motores y un equipamiento muy completo. Todo ello, combinado con un precio muy atractivo para tratarse de una berlina de casi 5 metros de largo.