El aeropuerto internacional Málaga-Costa del Sol lo tenía todo para superar la mítica barrera de los 20 millones de pasajeros en el año 2020. Hasta los números de volumen y del año daban juego. El 2019 había sido récord turístico y se quedó a las puertas con 19,85 millones de viajeros. La inercia turística positiva haría el resto. Pero llegó el Covid y todo se frenó de golpe. Daba impresión ver la terminal 3, normalmente un hervidero de gente, completamente vacía.
Han sido dos años de recuperación y, de hecho, el 2022 ha sido muy positivo con 18,4 millones de usuarios, ratificándose un año más como el cuarto mayor aeropuerto de España tras los de Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca.
¿Será el 2023 el año que realmente se superarán los 20 millones de viajeros en Málaga? Dar una respuesta rotunda sería ilógico, máxime con la necesidad de prudencia que nos ha dejado la pandemia o la guerra en Ucrania, pero es cierto que el 2023 apunta maneras.
Para empezar, el mes de enero, uno de los más flojos del año al ser temporada baja turística, ha arrancado con 1,12 millones de pasajeros. Es un 10,5% más que los datos de enero de 2019, cuando se tocó techo, según los datos oficiales de Aeropuertos y Navegación Aérea (Aena). "De cara a 2023 lo que podemos decir es que esperamos tener una oferta superior a la de 2019 y ya veremos la ocupación", decía Pedro Bendala, director del aeropuerto de Málaga, a inicios de año en una entrevista con este diario.
Una cosa está clara. Al aeropuerto de Málaga le va bien si a Ryanair le va bien. La línea irlandesa es líder absoluta en la Costa del Sol y en este inicio del año se ha vuelto a comprobar. Ha registrado 401.861 pasajeros en solo un mes. Es el 35% del total del aeropuerto o, dicho de otra forma, uno de cada tres viajeros en Málaga se sube a un avión de Ryanair.
La diferencia con el tráfico del resto de compañías es abrumador. La segunda en enero fue Vueling con 165.737 pasajeros y la tercera Easyjet con 47.850. Ryanair ha incrementado además su cuota de mercado en el comienzo del año. En el conjunto de 2022 movió a 5,1 millones de pasajeros en Málaga -algo más del doble que la segunda línea, Vueling- pero representó el 28% de los viajeros.
El tirón de Ryanair se debe a que es la compañía con mayor presencia en el aeropuerto de Málaga y en invierno se han reforzado. "Esta temporada de invierno ofrecemos un 17% más de plazas que en la misma temporada de 2019. Tenemos 73 rutas y estamos aumentando mucho las frecuencias. Por ejemplo, en la nueva ruta a Frankfurt tenemos cuatro frecuencias semanales. Tenemos 8 aviones basados en Málaga y para este invierno prevemos alcanzar los 2,1 millones de pasajeros en Málaga", indicó Elena Cabrera, Country Manager de Ryanair en España y Portugal, en otra entrevista con EL ESPAÑOL de Málaga.
Las compañías aún no han dado a conocer la programación completa de sus vuelos para la temporada de verano. Es la más importante, comienza a finales de marzo y representa el 70% del tráfico del aeropuerto de Málaga. Las líneas aéreas tenían hasta el pasado 31 de enero para solicitar sus slots para esta temporada veraniega -los permisos de aterrizaje y despegue-, por lo que será cuestión de días que se conozcan los detalles. Por ahora, ya se sabe que habrá un vuelo directo a Nueva York de United Airlines y se han anunciado otras rutas. Los 20 millones de pasajeros están en el horizonte.