Eran las 21.50 horas de este martes. Un chico de 34 años se había encerrado en casa amenazando con que quería quitarse la vida. Sus amigos llamaron para pedir ayuda, sin pensarlo dos veces, al Servicio de Emergencias del 112, alegando que el sujeto podría haber consumido "sustancias estupefacientes" y que había riesgo de que se suicidara.
Tras el aviso, dos patrullas del Instituto Armado se trasladaron a la residencia del individuo, donde estaba atrincherado. Los agentes estuvieron hablando largo y tendido con él, a través de una ventana, tratando de convencerle de que saliera. Durante la conversación, el hombre llegó a autolesionarse en varias ocasiones.
Fue clave en este final feliz una de las agentes que se personó en el lugar, una guardia civil en prácticas. "Hizo un gran trabajo, se lo curró", aseguran fuentes cercanas. Pese al poco tiempo que llevaba patrullando en el Servicio Ciudadano de Mijas, consiguió empatizar con el varón, que finalmente abandonó la idea de quitarse la vida tirando el cuchillo al suelo y abriendo la puerta. Tras el suceso, el hombre fue valorado por los servicios sanitarios que se encontraban en el lugar de los hechos y se le trasladó para valoración psiquiátrica, como rige el protocolo.
En caso de necesitar ayuda por un mal momento que estés atravesando, recuerda que la Asociación Internacional del Teléfono de la Esperanza mantiene abierta durante todo el año la línea de atención especializada 717 003 717 que trata de dar fuerzas a todos los que necesitan para que afronten la crisis por la que puedan estar atravesando. Siempre hay una mano que te ayuda, ya sea desde el Teléfono de la Esperanza o desde los Cuerpos de Seguridad del Estado.