Un conductor de 54 años acaba de ser condenado al pago de una multa de 8 euros diarios durante seis meses después de ser cazado por la Policía Local de Málaga circulando con su vehículo con una tasa de alcohol cinco veces superior al nivel máximo permitido y provocar un accidente que se saldó con tres personas heridas.
Así lo ha dado a conocer la Policía Local de la capital este viernes. Por medio de un comunicado, informa de que la pena ha sido impuesta tras un juicio rápido. A la penalización inicial hay que sumar el pago de las costas causadas, al tiempo que se le priva del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante doce meses.
Los hechos por los que ha sido condenado tuvieron lugar sobre las 16:00 horas de la tarde del pasado 5 de junio en la carretera A-357, a la altura del kilómetro 68 de la avenida Blas Infante, en dirección Centro.
Varios agentes se desplazaron hasta este punto después de que la Sala 092 informase de que se había producido un accidente de tráfico. El siniestro se había producido después de que la colisión de un turismo con la parte trasera de otro coche.
El vehículo que recibió el impacto por la parte trasera estaba ocupado por una familia de tres personas: un hombre, que conducía el vehículo y que se dolía del cuello; su pareja, que iba en el asiento del copiloto, que presentaba una herida sangrante en la boca; y el hijo de ambos, de 10 años, que viajaba en la parte trasera y presentaba dolor en la zona cervical. Todos ellos fueron trasladados por ambulancia del 061 a un centro hospitalario para recibir asistencia médica.
En cuanto al conductor causante del accidente, los policías locales comprobaron que se encontraba, a priori, ileso, si bien advirtieron notoriamente que presentaba síntomas inequívocos de encontrarse bajo los efectos del alcohol.
Por este motivo, los agentes le informaron de la obligación de acompañarlos a dependencias del Grupo de Investigación de Accidentes y Atestados (GIAA) de la Policía Local de Málaga para ser sometido a la prueba de alcoholemia mediante el procedimiento de aire espirado, accediendo a acompañarlos de forma voluntaria.
El conductor arrojó un resultado positivo de 1,38 y 1,34 miligramos de alcohol por litro de aire espirado en la primera y la segunda prueba, respectivamente, por lo que policías locales le leyeron los derechos como investigado no detenido como presunto autor de un delito contra la seguridad vial.
En cuanto al coche que conducía, fue inmovilizado y trasladado al depósito municipal de vehículos, quedando informado del lugar y los motivos de la misma, así como de que no podría hacer uso de vehículo a motor o ciclomotor mientras no desaparecieran las causas que motivaron la inmovilización.