A juicio de Teresa Porras no existe debate alguno sobre la Feria del Centro. Ni sobre su continuidad ni sobre el equilibrio que, a su juicio, parece haberse alcanzado en el casco antiguo. Tampoco hay dudas en cuanto a la continuidad del Cortijo de Torres como asentamiento del Real.
-¿Qué significa para Teresa Porras la Feria de Málaga?
-Para mí es un producto que genera riqueza, que genera empleo y que genera diversión. Esos son los tres ejes fundamentales de lo que es la Feria de Málaga.
-Esa, si me permite, es la respuesta de Teresa Porras política. Quisiera conocer cuáles son sus recuerdos de las primeras ferias.
-Mi madre me vestía siempre de gitana. Le gustaba coser y me hacía los trajes. El último que recuerdo que me puso fue uno blanco con ribetes rojos, de estos tipo tul. Me encantaba. Y me llevaban a los cacharritos del pueblo y me lo pasaba en grande.
-¿Habla del pueblo?
-Sí, de Lopera, en Jaén. Después, más mayor, fue cuando conocí la Feria de Málaga. Íbamos a las atracciones y después, con mi padre y con mi madre, recorría las distintas casetas.
-¿Qué es lo que más le gustaba de aquella feria en Málaga?
-Recuerdo que estaba en Teatinos.
-Poco o nada que ver con la de ahora…
-Este año cumplimos 25 años en Cortijo de Torres. Y llevamos 23 diciendo que nos vamos de allí. Y no nos vamos.
-¿Diría que las expropiaciones de los terrenos del Cortijo de Torres han sido de las mejores decisiones tomadas por el Ayuntamiento?
-Creo que sí. Es un espacio estupendo, aunque hay que sacarle más rendimiento al año. Ahí estamos trabajando a ver de qué forma se hace, para que al menos una calle quede como definitiva y que las casetas estén montadas definitivamente.
-Esa es una pretensión de hace años. ¿Se le empieza a ver color?
-No te voy a decir que tiene color para el año que viene, pero yo creo que tiene más cercanía.
-Por lo que me dice a Cortijo de Torres como escenario del Real le quedan muchos años aún.
-Es que eso se ha hablado por parte de los periodistas y de algunos partidos políticos, no por parte del equipo de gobierno. Eso nunca ha estado en el esquema del equipo de gobierno.
-¿Cuántos años lleva usted como responsable de la Feria?
-Pues desde hace unos 20 años.
-Y de todas esas ediciones, ¿hay alguna que recuerde especialmente?
-Recuerdo cuando dimos un paso cualitativo y cuantitativo de cambiar las maderas de las casetas por los paneles. Eso nos permitió mejorar las divisiones de las casetas y mantener la estructura todo el año. Fue una de las decisiones más importantes. Es verdad que gastamos un dinero ahí importante, pero al final se recuperaba en unos años sin ningún problema. De hecho, la gran mayoría de casetas siguen teniendo esos paneles.
-¿Cómo cree que ha evolucionado la Feria?
-Recuerdo cuando hicimos todas las calles que son tan largas en Cortijo de Torres y empezamos a poner detalles de lo que son las ciudades. Las dos fuentes con jábegas, la rotonda con biznagas de Málaga… Son señas de identidad. Diría que la Feria ha quedado muy bien. Y en el Centro, igual. Seguimos con la tradición de la feria. Este año hemos cambiado la portada y se ha acertado.
"La Feria de Málaga es abierta, no hay que pagar por entrar a ninguna caseta, no necesitas ningún amigo para divertirte en la Feria de Málaga… Tienes abierta la ciudad para la diversión"
-¿Qué distingue a la Feria de Málaga de otras?
-Una de las cosas que la distingue es que es abierta, que no hay que pagar por entrar a ninguna caseta, que no necesitas ningún amigo para divertirte en la Feria de Málaga… Tienes abierta la ciudad para la diversión.
-¿Tiene la sensación de que se está perdiendo la identidad? ¿Que esa parte de la Feria de jóvenes, con un determinado tipo de música, está empezando a pesar más que la parte tradicional?
-Creo que no, que hay demanda para todo. La Feria está muy bien organizada por los distintos espacios. Si quieres ir a la zona joven tendrás que darle lo que le gusta a la gente joven; la gente más mayor o la gente que le gusta la copla o el flamenco tiene otras actividades. Lo más importante que tiene la Feria de Málaga es que tiene distintos ambientes y que está muy bien organizada y troceada.
-¿Lo del debate de la Feria del Centro ya está superado?
-Creo que es un debate que los periodistas habéis puesto.
-Y los vecinos…
-Yo creo que los malagueños no tienen duda. La Feria del Centro se sigue manteniendo, lo único que se ha hecho es intentar reconducir y creo que el año pasado se consiguió. Ya creo que no hay debate. Todos estamos contentos. La hostelería, la restauración, los vecinos y el Ayuntamiento… Efectivamente hemos dado una vuelta de tuerca a la Feria del Centro y hemos conseguido entre todos eliminar lo que a nadie le gustaba, que era el desmadre.
-¿Cree que eso ya está reconducido?
-Por lo menos el año pasado se recondujo y muy bien. La Policía también hizo un trabajo estupendo en ese aspecto.
-Hasta ese momento había un problema…
-Sí, había un problema. Pero nosotros el año pasado, por ejemplo, la limpieza conseguimos terminarla entre las 23:00 y la 01:00 de la madrugada. Antes era limpiar y limpiar y limpiar después y no acabas hasta las 07:00 de la mañana.
-¿Y este año hay alguna medida planteada?
-Este año vamos a hacer lo mismo que el pasado. Ponemos en marcha actuaciones en la Plaza de San Pedro de Alcántara, que se suma a la Plaza del Obispo, la Plaza de las Flores, la Plaza de la Constitución y San Pedro. Los propios restaurantes de estos espacios cuidan de que no se desmadren y que haya un ambiente bueno, familiar. El año pasado lo consiguieron y este año estoy segura de que también lo harán.
-¿Maneja datos del impacto económico que puede tener la feria?
-Este año vamos a poner en marcha dos sistemas en el Centro y en el Real para ver las preferencias de la gente. Vamos a poder saber lo que la gente consume, qué es lo que más le gusta y lo que menos.
-¿Da por erradicado ya el tema del 'botellón'?
-No le voy a decir que hemos erradicado el 100%, pero sí muchísimo. Que habrá algunos esporádicos, no te lo puedo negar.
-Sí, pero lo que era una norma...
-Lo que era una norma, yo creo que ya eso sí lo hemos conseguido.
-El año pasado estudiaron la posibilidad de limitar la venta de alcohol en los bazares orientales del Centro. Y finalmente vieron que no era posible jurídicamente. ¿Este año han estudiado algo parecido?
-Desde el punto de vista jurídico no es posible. Y el año pasado el trabajo que hizo la Policía fue positivo. Ahí están los resultados y este año haremos lo mismo. Se estuvo muy pendiente de los puntos calientes.
"No hay conciertos de pago porque el caché de los artistas ha entrado en el presupuesto, pero eso no quiere decir que el año que viene no los haya; creo que a la gente tampoco le importa pagar"
-¿Va a haber conciertos de pago y gratuitos o este año ya no hay conciertos de pago?
-No hay conciertos de pago porque el caché de los artistas ha entrado en el presupuesto que tenía el Área de Fiestas. Eso no quiere decir que el año que viene volvamos a conciertos de pago. Yo creo que a la gente tampoco le importa pagar. Por eso digo que no me aparto esa opción para el año que viene. Este año se ha tomado esta decisión porque el caché de los artistas es menor.
-¿No tiene nada que ver el tema de que fuese objeto de críticas?
-En absoluto, en absoluto. Por eso digo que seguiremos trabajando en esa línea.
-¿Y los artistas que vienen son a los que pueda aspirar una Feria como Málaga?
-Yo creo que los artistas que tienen la Feria de Málaga están muy bien de caché. Y están a la altura de la Feria de Málaga. ¿Por qué no? Entiendo que sí.