El barrio de la Victoria de Málaga se ha convertido en los últimos años en nuevo epicentro de proyectos hoteleros de la capital de la Costa del Sol. Su localización a escasos metros del Centro histórico y la falta de parcelas libres en esta zona de la urbe elevan su atractivo para los muchos inversores interesados en tener presencia en la ciudad.
El último ejemplo de ello es el proyecto que ya está tomando forma en la Gerencia de Urbanismo y del que ha sido aprobado inicialmente el estudio de detalle, instrumento con el que ordenar el desarrollo de un establecimiento que nace con la previsión de ser de 3 estrellas, pero que podría crecer a 4 estrellas durante la tramitación.
En función de la categoría final, el número de habitaciones podrá variar. Las que están marcadas en la hoja de ruta actual son 50 habitaciones, con una inversión material de unos 2,5 millones de euros.
La ejecución de este proyecto hotelero, impulsado por Seminare Iberian Real State y con la firma del arquitecto Óscar Agudo, va a permitir la recuperación de varias edificaciones situadas en la calle Cristo de la Epidemia, cuyo estado de conservación actual es bastante lamentable. En concreto, la intervención afecta a los números 24, 26, 28 y 30 de esta vía.
El objetivo es el de respetar la arquitectura original de los inmuebles, que datan del año 1900. Aunque al mismo tiempo se quiere maximizar el aprovechamiento disponible. Es por ello por lo que se plantea elevar una planta más en el 28 de Cristo de la Epidemia, "con objeto de igualar las cornisas al conjunto edificatorio al que pertenece, haciendo uso de una cubierta inclinada para adaptarse así al entorno que le rodea".
El tratamiento exterior de esta nueva planta atendiendo a las consideraciones expuestas en el informe de la Delegación de Cultura, no será mimético a lo existente, pero respetando los elementos arquitectónicos existentes.
Se realizará la agrupación de los números 28 y 26, ya que al tratarse de dos inmuebles que comparten la escalera existente, mantienen su funcionalidad, manteniendo en los números 30 y 24 su independencia funcional.
Debido a las superficies construidas existentes en los diferentes inmuebles que conforman este conjunto edificatorio, se realiza una redistribución interior de la superficie construida existente, ya que los elementos construidos anexos existentes en la actualidad en el interior de los patios, pese a tener su cierta antigüedad no son coetáneos con el resto de la edificación principal, por lo que se considera oportuno proponer su demolición con objeto de conseguir las trazas del estado original, dejando a los patios libres de edificación, pero reubicando su superficie construida en el resto del conjunto. De este modo se mantiene la superficie construida del conjunto, adaptando al nuevo uso de residencial público en su nueva categoría hotelera.
Los patios serán los que garanticen la luz y ventilación a las habitaciones interiores, liberando estos de las edificaciones que actualmente existen en el interior de ellos y manteniendo a su vez las alturas en la parte posterior de la edificación.
Se da la circunstancia de que antes de este último movimiento, en 2004, ya fue planteado un estudio de detalle elaborado por el arquitecto Carlos Hernández Pezzi para la ejecución de 10 viviendas y locales promovido por la Sociedad Inmobiliaria Larios S. A.
Posteriormente fue tramitado otro documento semejante, aunque en esa ocasión un nuevo buscaba la agrupación de las parcelas de los inmuebles 24, 26, 28 y 30, redactado por Miguel San Juan Cerdá, para uso hotelero, promovido por Tateldaco, S. L., siendo denegado por el Servicio de Planeamiento.