Infografía de la promoción residencial proyectada en la calle Estébanez Calderón, en Málaga.
Málaga da luz verde a dos promociones para residir cerca del Centro y no son viviendas turísticas
El Ayuntamiento de Málaga otorga permisos para la construcción de una promoción de 40 pisos cerca de calle Mármoles y otra de 12, en la Alameda de Capuchinos.
29 abril, 2022 12:38Noticias relacionadas
No todo van a ser viviendas turísticas en el entorno del Centro histórico de Málaga. La Gerencia de Urbanismo de la capital de la Costa del Sol acaba de conceder dos licencias para la construcción de sendas promociones residenciales, con una inversión superior a los 4 millones de euros y que van a permitir sumar al actual parque de viviendas 52 nuevas unidades.
La de mayor dimensión es la prevista en la calle Estébanez Calderón, 13, vía localizada cerca de la calle Mármoles y en las proximidades de El Corte Inglés. La promotora es Jitesa Invest, una empresa con sede en Madrid dedicada a la compraventa e intermediación de toda clase de fincas rústicas y urbanas, la promoción y construcción sobre las mismas de edificaciones, rehabilitación, administración, venta o arrendamiento.
La intervención, bautizada como El Jardín del Perchel, consiste en la ejecución de un bloque con capacidad para 40 viviendas, 60 plazas de aparcamiento, 9 trasteros y dos piscinas en la cubierta. El coste de ejecución material estimado es de 3.231.648 euros, siendo el plazo de obra de 24 meses.
La segunda de las promociones se encuentra situada en la Alameda de Capuchinos, 7 y 9. La previsión es que contenga 12 viviendas. En el expediente de licencia, en el que se cuantifica el coste de ejecución en 828.326,4 euros, con un plazo de 12 meses, se destaca que se trata de una parcela afectada por el acueducto de San Telmo, sobre la que se dibuja un edificio de planta baja más cuatro alturas.
En el documento oficial se indica que si bien es obligada la reserva de 12 plazas de aparcamiento, el proyecto sólo prevé 9. En el estudio de detalle aprobado para ordenar la edificación se precisa que "la cercanía del acueducto de San Telmo, hace inviable técnica y económicamente la dotación de las plazas de aparcamiento en el subsuelo al tener que realizarse mediante muros pantalla con la consecuente posible afectación arqueológica y la pérdida de espacio, que imposibilitaría su aprovechamiento como aparcamiento".
