Málaga

Diez años después de que fuese aprobado el Plan General de Ordenación Urbanística de Málaga (PGOU), el Ayuntamiento de la capital da el primer paso para activar la transformación de una de las grandes bolsas de suelo del espacio urbano: el polígono industrial de San Rafael. 

La extensión, de casi 234.000 metros de suelo da cabida en la actualidad a naves industriales obsoletas, las cocheras de la Empresa Malagueña de Transportes y los Servicios Operativos, entre otros usos. El deseo municipal es que en los próximos años tenga lugar el traslado de todas estas instalaciones para conformar un nuevo barrio con capacidad para unas 2.800 viviendas (160 VPO), importantes desarrollos comerciales y terciarios y zonas verdes.

La dimensión de esta intervención es mayúscula. A los parámetros edificables hay que sumar la complejidad que supone tramitar un desalojo del espacio industrial. De hecho, el propio concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, ha confirmado que la aprobación inicial del PERI San Rafael ha sido impulsada "de oficio" por el Consistorio. Ahora, los privados de la zona tienen tres meses para presentar alegaciones y hacer observaciones. 

Respecto al futuro emplazamiento de estos desarrollos productivos, López ha recordado la existencia de once parcelas distribuidas en la ciudad donde podrían trasladarse muchos de los afectados. En el caso de la EMT y Servicios Operativos, ya hay una hoja de ruta estudiada por el equipo de gobierno. La primera de ellas, de hecho, avanza en la construcción de unas nuevas instalaciones en la calle Paquiro, junto al Auditorio.

Otra de las imágenes de la ordenación propuesta.

De manera detallada, el Plan Especial de Reforma Interior ahora en desarrollo no sólo reserva 224.319 metros de techo para uso residencial, que se materializará en edificios de un máximo de planta baja más 10 alturas, sino que reserva 12.800 metros de suelo para uso terciario, con posibilidad de oficinas y comercial, en los que se alcanzará un techo máximo de 87.000 metros. Asimismo, se dibuja una reserva de 57.000 metros de zona verde.

Se trata de un sector que se localiza al norte de los terrenos de Repsol, en los que se prevén cuatro edificaciones en altura, una de ellas de 35 plantas, y al norte del bulevar Adolfo Suárez. De hecho, una de las operaciones que podría desarrollarse gracias al avance de la urbanización de San Rafael es la materialización del viario previsto desde hace años entre la estación de autobuses y la MA-21 y el Palacio de Ferias. 

A juicio del concejal de Ordenación del Territorio, los usos contemplados en San Rafael servirán de complemento a lo previsto en Repsol, donde se quiere dar protagonismo a la vivienda en alquiler y a las oficinas. En este sentido, se habla incluso de dar forma a una especie de bulevar comercial que dé continuidad a la actual calle La Unión.

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