Blackdice es, en palabras de su fundador Paul Hague, "una empresa impulsada por un propósito". Su experiencia personal como padre le hizo conocer de primera mano los peligros que podía tener Internet para los menos protegidos, como fue el caso de su propio hijo. "El propósito de comenzar la empresa fue crear tecnología que ayudara a los ciudadanos y a las pequeñas y medianas a empresas a estar más seguros en línea, ya sea en educación, entretenimiento o negocios", explica el CEO de la compañía en una entrevista con EL ESPAÑOL de Málaga.

Actualmente, trabajan con operadores de telecomunicaciones que toman su tecnología y la integran. "Actuamos como el guardián seguro entre la red y el Internet, observando cómo se comportan tus dispositivos y qué es normal para detectar anomalías y amenazas emergentes antes de que causen daño", desarrolla Hague.

Su tecnología se basa en la inteligencia artificial y en la gestión de datos; además de ofrecer soluciones de control parental. Gracias a ella, trabajan con operadores de Europa, Asia, Estados Unidos y América Latina: "Nos enfrentamos al reto de proteger cientos de millones de dispositivos a nivel global, lo que presenta desafíos tecnológicos significativos", expresa. Y todo ello, desde Málaga.

"Llevamos aquí 18 meses, llegamos en agosto de 2022", explica Hague, de origen británico, que explica que aún siguen teniendo el equipo técnico en aquel país: "Razones políticas obvias nos hicieron querer salir del Reino Unido, así que nos vinimos aquí. Buscábamos un lugar con un estilo de vida al aire libre, pero también donde pudiéramos construir un negocio".

Sin embargo, desde la perspectiva de Hague, Málaga también cuenta con varios retos, especialmente, en lo que respecta al acceso al capital riesgo para pequeñas empresas. "El mayor desafío es conseguir la financiación adecuada", ha manifestado, enfatizando la importancia de aprovechar las oportunidades para que las empresas no solo sobrevivan sino que también contribuyan al empleo local.

"Hay una ventana de oportunidad que debe aprovecharse para que estas empresas no solo sobrevivan, sino que también proporcionen empleo en la región", reflexiona el CEO de Blackdice sobre el auge tecnológico de la ciudad: "Somos conscientes de que hemos venido aquí como inmigrantes y es importante para nosotros contribuir a la prosperidad de la ciudad y emplear a la gente local".

Hague también expresa su preocupación por el potencial desplazamiento de la población local debido al aumento de los precios de alquileres y viviendas, pero se mostró optimista sobre la posibilidad de mitigar este problema a través del crecimiento económico: "Si logramos obtener la financiación correcta y el crecimiento de nuestro negocio, podemos contribuir a que esto sea menos problemático para la ciudad", expresa.

Con un equipo de 15 personas, de las cuales tres están en Málaga, Blackdice tiene planes de expansión significativos. "Esperamos crecer a 8-10 personas para fin de año, y aún más el próximo año", ha indicado Hague. Este crecimiento viene también impulsado por el éxito reciente en el Mobile World Congress en Barcelona, donde la empresa consiguió añadir un importante volumen de negocio. Para el CEO, este logro marca un punto de inflexión.

"Creo que tenemos la oportunidad de convertirnos en un importante empleador en la ciudad y en un importante generador de ingresos. Estamos empezando a atraer operadores de primer nivel y generando negocios en varios países", resume el CEO de Blackdice: "El próximo paso es finalizar los despliegues en los que estamos trabajando y luego comenzar a escalar y hacer crecer el negocio aquí en Málaga".