Imagínese. Llega el momento que usted llevaba esperando toda la semana: a su equipo le está yendo regular esta temporada, pero es domingo; coge de la mano a su hijo o hija, le ata al cuello la bufanda del club de sus amores, van al templo y disfrutan viendo una partida... del videojuego League of Legends.
Hoy día puede parecer una escena algo exótica, pero no está lejos. El club de deportes electrónicos o e-sports Vodafone Giants lleva ya varios años apostando por convertirse en un referente para la afición de la ciudad de Málaga, donde está afincado, y la reciente apertura de su nueva sede, el imponente Home of Giants, les acerca un poco más a la escena descrita.
Desde su fundación en 2008, el club malagueño ha pasado de ser una asociación de jugadores que simplemente querían competir a ser el club más laureado de una de las disciplinas de entretenimiento más pujantes de España.
En abril de 2018, Vodafone se convirtió en su patrocinador y, en mayo de 2020, el club cerró una ronda de inversión del grupo Sánchez Cózar por tres millones de euros. Una captación que nunca se había hecho por parte de un club de e-sports en España y que le sitúa en unas cifras que, a nivel provincial, solo el Málaga CF y el Unicaja pueden superar. No se dedican al deporte y, sin embargo, son ya por derecho propio el tercer club de la provincia.
"Esto es generacional. Despreciarlo es como decir que Internet era una moda. Estos chavales están creciendo y siguen consumiéndolo. Su mundo, su forma de socializar y de comunicarse es a través del videojuego. Cuando tengan hijos, consumirán este tipo de contenidos con ellos", sentencia en conversación con EL ESPAÑOL de Málaga la copropietaria de Giants Virginia Calvo.
Lo que no significa que espere que todas las edades lo comprendan en plenitud: "No es nuestro target (objetivo), pero en general a cualquier persona mayor de 30 años que tenga hijos en edad de videojuegos, esto le suena", sonríe.
Desde que -junto a José R. Díaz- su empresa pasara de patrocinadora a propietaria de del club en 2012, comenzaron la profesionalización de Giants en un sector entonces en construcción. El proceso ha desembocado en la creación en octubre de 2020 de Good Game Group, una gran compañía con vertiente de competición en e-sports (donde se sitúa Giants y otra entidad más), de creación de contenido y de venta directa de productos.
En 2020 facturó 2,5 millones de euros y en 2021 esperan alcanzar los 3,5 M. Un imperio en auge con su punta de lanza en Málaga que se define como "todavía relativamente pequeños respecto a lo que podemos llegar a ser".
"No sabíamos que esto iba a convertirse en esto. Era una inversión para patrocinar y vender nuestros productos que empezó a adquirir un carácter propio", relata Calvo, que incide en el enorme crecimiento del sector de las competiciones de videojuegos "en los últimos 3 o 4 años": "Empezó todo en plan egoísta, pero los e-sports te atrapan. Es muy divertido, hay un componente de emoción, de nervios, de sentir los colores. El aprendizaje y la evolución ha sido brutal", relata.
Una pasión por esta competición que quieren que traspase las pantallas y se sienta como arraigada en la ciudad: "La apuesta ha sido clara aquí. En cuanto salimos a decir Aquí estamos, nos acogieron y nos apoyaron. (...) A mí me gustaría que todos los malagueños sintieran que tienen un equipo de e-sports que les representa por todo el mundo", subraya.
A muchos de los otros clubes de videojuegos apenas se les puede identificar de dónde son, pero en el mundillo todos saben que Giants son de Málaga. Y son los mejores.
Tiempo de juego
Los gigantes están jugándose la clasificación para el play-off en la competición de League of Legends (LoL). No está siendo una temporada fácil, pero mantienen la fe. Las seis ligas ganadas en el pasado y el prestigio del club les respaldan.
Ismael Martínez, alias miniduke, llega a Home of Giants concentrado junto al resto de su equipo. Son las estrellas del club, cinco jugadores profesionales de cuatro nacionalidades distintas (hay un portugués, un turco y un inglés) que conviven junto a su mánager en Alhaurín de la Torre.
Tiene 23 años, lleva jugando al LoL desde su lanzamiento en 2009 y compitiendo desde hace 6 o 7 años. La situación era entonces muy distinta: "Yo iba a un torneo y el premio final era una alfombrilla para el ratón de diez euros, y yo tan contento", relata a este periódico. El mismo año que dejó los estudios, fue campeón de España.
Ahora llega a jugar junto a los dos entrenadores del equipo y el director deportivo del club al Home of Giants, una sensacional sede de 1.000 metros cuadrados en el Polígono de San Luis que ha supuesto una inversión de un millón de euros y que incluye oficinas, tienda, cocina, zonas de grabación y, por supuesto, un auditorio en el que jugar que esperan que se pueda llenar de público en cuanto la pandemia lo permita. También quieren convertirlo en un centro de referencia para charlas y encuentros en Málaga.
"Me reconforta mucho, todo esto antes no existía", opina miniduke sobre el desarrollo de la industria, de la que le cuesta predecir el futuro ("Hace 5 años te preguntan qué crees qué va a pasar y no te imaginas lo que hay ahora"), pero que hoy ya le sirve para que los aficionados le reconozcan ("No soy Maluma como para que me conozca todo el mundo, pero por mi parte todo bien").
Incluso el futuro más próximo de la disciplina es algo imprevisible: el director deportivo de Giants, David Alonso alias lozark, gallego de 29 años que ha pasado los últimos 7 en el club, explica que una de las claves para ganar es adaptarse a los cambios en las propias normas de las competiciones: las distintas actualizaciones, los modos cambiantes, la apuesta por un videojuego u otro... Pero hoy toca el clásico League of Legends.
Después de la conversación con EL ESPAÑOL de Málaga, miniduke y sus compañeros lograron una victoria clave contra S2V Esports en la partida más larga de la temporada, cargada además de polémica por problemas con el servidor del juego. Un triunfo agónico para salvar el punto de partido y seguir abonados al sufrimiento en esta temporada de LoL. Sí que se están tomando en serio lo de ser el equipo de Málaga.