Málaga tendrá dos millones de habitantes en el año 2037, es decir, dentro de 15 años. Esa es la proyección realizada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que señala que la provincia malagueña será una de las que más incremente su número de residentes en España en este periodo.

El INE apunta que Málaga pasará de los 1,71 millones de habitantes en el actual 2022 a los 1,99 millones en 2037, lo que supondrá un aumento del 16,5%, prácticamente el doble que la media nacional, cuyo crecimiento estimado es del 8,9% desde los 47,4 hasta los 51,6 millones de personas. 

Málaga será, porcentualmente hablando, la sexta provincia española que más verá incrementada su población en los próximos 15 años. La primera, según el INE, será Baleares con un 25% hasta los 1,5 millones de habitantes. En otra isla, en este caso canaria, se espera un aumento del 19,3% en Santa Cruz de Tenerife hasta los 1,3 millones de residentes. 

En Alicante el INE considera que elevarán su población un 18,5% hasta los 2,2 millones, mientras que en Gerona y Guadalajara lo harán cerca de un 17% hasta los 908.000 y 310.000 ciudadanos respectivamente. 

Como puede apreciarse, los mayores crecimientos se dan -a excepción de Guadalajara que puede convertirse en ciudad dormitorio de Madrid- en provincias costeras y turísticas. Y Málaga es una de ellas. 

Hay dos aspectos importantes a tener en cuenta. El primero es que ese aumento poblacional tendrá como principales protagonistas a los extranjeros, pues los españoles como tal apenas subirán. En el caso concreto de Málaga, se prevé que la población extranjera pase de los 355.000 personas actuales a las 601.000 en 2037, un 70% más. Los residentes españoles apenas se elevarán un 2,7% en quince años hasta los 1,39 millones.

Por otra parte, habrá más personas residiendo en la provincia de Málaga y más mayores. El envejecimiento de la población es ya evidente y la tendencia continúa. En 2037, por ejemplo, se prevé que se duplique la población mayor de 90 años, mientras que hay un estancamiento o incluso un descenso en los menores de 18 años.