El idilio entre España y Málaga en la Copa Davis ha durado algo más de cinco horas y media. Las que tardaron en terminar los dos partidos de la eliminatoria de cuartos de final que los de Sergi Bruguera jugaron contra Croacia en la pista del Martín Carpena. Ni Roberto Bautista ni Pablo Carreño pudieron con Coric ni Marin Cilic, y no hizo falta ni siquiera el dobles para dejar cerrado el pase a las semifinales.
El público llenó las gradas, se enganchó al final del segundo partido, cuando la posibilidad de victoria de Pablo Carreño se veía cerca, pero el asturiano cayó en el tie-break del tercer set (5-7; 6-3; 7-6), y con él toda la selección española. Antes, Roberto Bautista no tuvo opciones contra Borna Coric y perdió 6-4 y 7-6. Croacia seguirá peleando por la ensaladera contra Australia.
A Borna Coric no le ha temblado el pulso durante la hora y cincuenta y seis minutos que ha durado el primer partido de la eliminatoria entre Croacia y España de los cuartos de final de la Copa Davis que se está disputando en Málaga. Y así, se ha llevado el partido contra Roberto Bautista en dos sets, 6-4 y 7-6, pasando de esta forma la pata caliente a Pablo Carreño para el segundo choque de la eliminatoria.
Dos jugadores muy serios se plantaron sobre la pista rápida del Martín Carpena para abrir la segunda jornada del evento, que llenó las gradas del pabellón malagueño.
La máxima igualdad fue la tónica hasta el séptimo juego del primer set. Coric y Bautista estaban muy seguros con su servicio. Pero el de Castellón dudó, falló, y el croata consiguió el break. El único de todo el choque. 4-3 y servicio a su favor, con el que puso el 5-3. Ganó Bautista su saque, pero no dio opción ninguna Coric de pelear el empate. 6-4 y a por la segunda manga.
El segundo set empezó con la misma igualdad que el primero. Pero las dudas tardaron más en llegar. Hasta el tie-break. Antes, Bautista superó los cuatro juegos y gritó con rabia tras anotarse el quinto. Se había metido en la zona caliente del set con ventaja. Cogió confianza el español. Pero Coric había saltado a la pista para darle el punto a una de las favoritas, la subcampeona del torneo en concreto. No cedió Coric, no dudó nunca a pesar del empuje de Bautista, que se metió más en la pista.
Y así llegó el choque al tie-break. Con Roberto Bautista con todo que perder, y lo perdió. Tras ganar su primer turno de servicio cada jugador, con 2-1 para Coric, Bautista dejó ir sus dos saques. 4-1. Un lastre que ya no levantó. Se puso con 6-1 Coric y el español tiró de raza para ponerse 6-4. Coric fue la misma roca. Se sacó de la raqueta un ace para darle el partido y el punto a Croacia. 6-4; 7-6.
En su turno, Pablo Carreño ilusionó desde el principio de su partido y se llevó la primera manga del choque. El desenlace no llegó hasta el final, con 5-5, tras haberse roto el servicio mutuamente en los dos primeros juegos, el español consiguió el break y cerró el set con su servicio. 5-7 y a soñar.
Empezó igualado el segundo set pero, pero con 3-2 para Cilic y saque para Carreño, el gigante croata, ganador del US Open en 2014 y que llegó a ser número 2 del mundo, rompió el servicio y puso el 4-2. De ahí hasta el 6-3 definitivo del segundo set y todo por jugarse en el tercero.
En esa manga, tanto Carreño como Cilic se rompieron el servicio en dos ocasiones y llevaron el choque al tie-break. El Carpena ahí ya había llegado encendido, desde que Carreño recuperó el break perdido y volvió a igualar el choque.
Empezó de dulce el asturiano, poniendo la imaginación en algunos golpes a donde no le llegaron las piernas. Llegó a ponerse 4-1. A partir de ahí solo hubo un hombre en la pista. Cilic, con su 1,98 sobre la pista indoor de Málaga remontó hasta llegar al 5-5. Pasing desde la red y 6-5 más bola de partido. Movió a Carreño de una esquina a otra hasta que al español se le fue larga. Cilic agachó la cabeza y señalando al banquillo se fue para la red a darle la mano a su rival.
Acababa de poner fin al idilio que querían vivir España y Málaga este fin de semana en la Copa Davis. Pero todo ha quedado en una tarde noche, en la que ni siquiera hubo un final feliz.
La Davis sigue hasta el domingo, España se queda en el camino y Málaga tendrá que elegir nueva pareja de baile.