La fecha estaba señalada en rojo en el calendario de todos los cofrades desde hace días. Ayer sábado, 30 de octubre se celebraba la procesión magna y eso era sinónimo de alegría: tras más de 900 días, las calles estarían repletas de gente por un mismo motivo, la devoción por los Titulares.
Así, nuestro malagueño más internacional, el actor Antonio Banderas, que es uno de los capataces de Lágrimas y Favores, dejó el sábado libre para estar en su ciudad disfrutando de una de las tradiciones que más le gusta, la Semana Santa.
El malagueño se encontraba fuera de la procesión, disfrutando de la Hermandad de la Sentencia como un cofrade más, cuando decidió incorporarse por un rato a los varales para afrontar una de las partes más duras del recorrido, la subida de Casapalma
En el vídeo se puede comprobar cómo intenta pasar lo máximo desapercibido mirando hacia el frente rodeado de los hermanos de la Sentencia. Se le nota emocionado sintiendo la marcha, 'La Esperanza de María', e incluso cada indicación que ofrece el capataz.
El actor siempre ha sido un gran abanderado de nuestra tradición, no solo a nivel religioso, artístico y cultural, sino también de su trasfondo más social. El pasado mes de abril el malagueño respondía a los detractores de la Semana Santa que "tras el manto de una Virgen hay muchas bocas comiendo, gente que cobra por su trabajo y lleva un dinero a casa". Refiriéndose a la cantidad de artistas y modistas que trabajan para tejer estos largos mantos.
Y no fue la única figura pública que pudimos ver entre los varales de la procesión Magna. En el trono del Cristo de la Exaltación, el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. Lleva veintiocho años sacándolo y reconoce que estos dos años sin procesiones han sido "muy duros para los cofrades".