La Escuela Superior de Artes Escénicas de Málaga (ESAEM) entregó anoche los Premios de las Artes Escénicas Antonio Banderas de ESAEM a tres personalidades del sector artístico en sus diferentes disciplinas: Alejandro Sanz, en el ámbito musical; Javier Quintas, en el ámbito cinematográfico y Javier Castillo, en el literario.

La gala tuvo lugar en el Teatro de los Jóvenes Artistas Antonio Banderas de la propia escuela y no quisieron perderse la gala otras celebridades como las cantantes Pastora Soler e India Martínez; esta última, después de ser la homenajeada en 2022, volvió a vivir la experiencia de subir al escenario a por un premio para recoger el de Alejandro Sanz, que no pudo acudir a la gala.

Tal y como dijo la directora de ESAEM, Marisa Zafra, el lema de la gala fue: "La música y el arte no se tocan", como reivindicaba en una de sus canciones el maestro Alejandro Sanz. Es por ello por lo que para abrir boca, los alumnos del Doble Grado de Arte Dramático y Artes Escénicas de ESAEM interpretaron una versión reducida del musical Hair.

Con una puesta en escena desenfadada, fresca, y muy puesta al día con la actualidad política y social --convirtieron aquella reflexión sobre la guerra de Vietnam en una sobre la de Ucrania--, los jóvenes artistas de la escuela desataron los aplausos y vítores del público asistente, en gran parte, compañeros que le han visto trabajar en el proyecto en las últimas semanas.

La segunda parte de la gala se centró en la propuesta artística y original de la malagueña Lena Zafra, quien logró que un grupo de alumnos se impregnaran de la magia de la música de Alejandro Sanz para versionar sus temas y llevarlos a su propio estilo en una live-perfomance que muy pronto podrá verse en las redes sociales de la escuela. "Yo quería meterles a Alejandro porque su música ha supuesto mucho para mí y ellos están en otra onda; quería que vivieran lo mismo que yo", declaró Marisa Zafra.

En palabras de Lena Zafra, “en realidad, el verdadero premio que entregamos a Alejandro Sanz es este homenaje único a su trayectoria artística, en el que hemos combinado las artes escénicas con las pantallas, con las que hoy en día estamos tan conectados; una especie de híbrido entre escena y tecnología que no ha dejado indiferente a nadie”.

La escuela otorgará al maestro su premio en el concierto que ofrecerá el 6 de julio en Málaga, pero de igual forma India Martínez fue la encargada de recogerlo. "Alejandro me ha dicho que te camela mucho, Antonio", dijo la cordobesa entre risas, a la par que aseguró que Sanz iba a "alucinar" con las actuaciones de los chicos, que versionaron temas clásicos como Corazón Partío o No me compares.

"Sois chicos y chicas con un gran talento, grandes artistas que aunque

empezáis ahora, tenéis toda la enjundia y todo el arte del mundo. Disfruten mucho de la noche, y, por favor, háganme un sitio por si en algún momento puedo ir a visitarlos, ¡osquiero mucho!", dijo Alejandro en un vídeo que hizo mucha ilusión a los alumnos.

El segundo de los premios fue para Javier Quintas, reconocido productor de ficción

audiovisual (La Casa de Papel, Sky Rojo, etc.), que ha sido galardonado por su trabajo como director en numerosas piezas audiovisuales que han sido el entretenimiento de los chavales de la escuela durante años. Su próximo proyecto, El Zorro, según declaró a EL ESPAÑOL de Málaga: "El Zorro de esta generación será Miguel Bernardeau, aunque eso no significa que Banderas se quede como el antiguo. Él será siempre El Zorro por excelencia".

Durante la entrega, la directora de la escuela recordó cómo Quintas les ayudó a superar los estragos del confinamiento en 2020. El director les ofreció una masterclass por videollamada que supuso un chute de ilusión para el alumnado en unos momentos de lo más complicados. A Quintas se le vio especialmente sorprendido por el show de los chavales y no dudó ni un segundo en ofrecerles su ayuda para todo lo que necesitaran en el futuro. "Ha sido increíble, tenéis toda la pasión y toda la ilusión para todo lo que os viene por delante", dijo.

El último premiado de la noche fue el malagueño Javier Castillo, el escritor de moda, después del éxito que ha tenido la serie de La Chica de Nieve por Netflix, que se alzó por unas semanas como la serie más vista del mundo. Muy pronto empezará el rodaje de El juego del alma, no se atrevió a dar una fecha concreta, pero apunta que ahora está inmerso en el proceso de guion. "Del Cuco de Cristal, de momento no sabemos si se hará peli o serie... pero vendidos están los derechos", declaró. 

Ahora se encuentra trabajando en la novela que dará un "final apoteósico" a Miren Rojo, uno de sus personajes más especiales. "Espero que salga el año que viene si todos los plazos se cumple", dijo a EL ESPAÑOL de Málaga.

Ya con el premio en sus manos, calificó de increíble lo que vio anoche sobre las tablas del auditorio. "Estoy completamente abrumado, esto ha sido un auténtico espectáculo, y he sido testigo de una pasión que se ha podido palpar. Yo creo que lo que habéis hecho hoy aquí es algo que no podéis perder jamás", declaró, a la vez que quiso invitar a los jóvenes a que soñaran en alto, pero siempre con los pies en el suelo. 

Para acabar, Marisa Zafra quiso hacer alusión a una cita de Sanz: "Una

canción no puede parar un tanque, pero sí puede romper el corazón al soldado que lo lleva". Un gran lema para poner el broche final a una noche donde el arte fue la mejor trinchera para todos los presentes.