Málaga es la provincia que más quebraderos de cabeza le está trayendo a Juan Espadas desde que fue elegido secretario general del PSOE andaluz. De hecho, el mismo día de las elecciones ya fue una china en el zapato, porque en la provincia el nuevo líder socialista perdió. El papel de Ruiz Espejo y otros clásicos socialistas llevaron la balanza a favor de Susana Díaz. Ahora, esa realidad vuelve a salir a la superficie tras meses de trabajo subterráneo.
Espadas, que estuvo en Málaga el pasado jueves, quiso plantarse y poner sobre la mesa los galones de secretario general. Así, exigió a los socialistas malagueños a ponerse de acuerdo y presentar una lista de consenso "e impuso a Dani Pérez como líder", aseguran fuentes socialistas. Hubo un acuerdo entre partes, pero no de todas las familias en las que está dividido un PSOE en recuperación.
Ese acuerdo incluía que José Bernal, todavía presidente del PSOE y portavoz de la oposición en Marbella, se hiciera con el cargo de secretario de organización: "Es como poner al lobo a cuidar de las ovejas", indican otras fuentes que recuerdan el "susanismo militante" de Bernal.
El arreglo, según fuentes internas, se fraguó incluyendo en este juego de cartas a Nacho López, quien formará parte de la ejecutiva regional: "Lejos de contentar a todos, lo que han hecho ha sido enfadar a muchos: los sanchistas están enfadados por López y los de Ruiz Espejo también lo están". Insisten desde diversas fuentes del PSOE de Málaga que "todas las familias están indignadas" con el acuerdo.
"Es una carambola a tres bandas que abre muchas heridas", indican. "Hay mucha gente que dio la cara para que Espadas fuera secretario general del PSOE andaluz y piensan que ahora ha entregado el partido a sus propios verdugos: no es una deslealtad, es una maldad", agregan fuentes socialistas.
La entrada de José Bernal como número dos del PSOE malagueños "ha sido una estrategia en la que han simulado un inexistente bloque anti Dani Pérez para ganar tiempo y acabar llegando a un acuerdo como salvadores, ofreciendo un equipo ejecutivo" para el actual portavoz de la oposición del Ayuntamiento de Málaga.
Alcalde de Ojén
Quien puede salir ligeramente beneficiado de este acuerdo es José Antonio Gómez, alcalde de Ojén, quien ha confirmado que se presentará el próximo 12 de diciembre a secretario general del PSOE de Málaga. Lo hace mientras enfrente se cierra una candidatura a varias bandas.
Gómez tendrá que luchar durante esta semana contra el aparato del partido, ya que el día 8 tendrá que presentar su precandidatura y el 13 de noviembre los avales. Las semanas hasta el congreso provincial estarán marcadas por este proceso siempre que el primer edil de Ojén consiga este primer hito.
También servirá como termómetro interno el congreso de los socialistas andaluces que se celebra este fin de semana en Torremolinos. En él cada movimiento, cada conversación y cada apoyo se medirán al milímetro.