La importante inversión que rodea la ampliación del Hospital Costa del Sol de Marbella, recientemente impulsada por la Junta de Andalucía, ha suscitado el interés de las grandes empresas constructoras nacionales. De acuerdo con la información oficial, son ocho las empresas o alianzas empresariales las que van a pujar por hacerse con un contrato que alcanza, de inicio, los 51,7 millones de euros (incluido el IVA).
En concreto, las proposiciones son las de Ferrovial Construcción; Acciona Construcción; la UTE Cartuja Inmobiliaria y Construcciones Bonifacio Solís; la UTE integrada por Sacyr Construcción y CFVC Construcciones; la UTE compuesta por FCC Construcción, FCC Industrial e Infraestructuras Energéticas; la UTE de Constructora San José y Construcciones Sánchez Domínguez-Sandoz; la UTE de Puentes y Calzas Infraestructuras y Lirorla Ingeniería y Obras, y la UTE integrada por Dragados, Azvi y Martín Casillas.
De todo ello se informa en el acta de la mesa de contratación fechada en la jornada de ayer. Estas son las firmas que optan a desarrollar una de las grandes infraestructuras sanitarias de la Administración regional en la provincia. Con este movimiento, retoma un proyecto que quedó paralizado hace algo más de una década. El plazo previsto es de 21 meses a contar desde la formalización del contrato.
De la urgencia de esta intervención queda constancia en la memoria justificativa que acompaña el concurso ahora activado. En la misma se subraya "déficit estructural crónico" que presenta este centro debido a la paralización de la ampliación, al tiempo que se pone el acento en que "ya estaba al límite de su capacidad antes del inicio de la pandemia".
A ello, desde la Administración regional suman la incidencia que tiene sobre la capacidad asistencial el incremento de la población en el entorno de la Costa del Sol. Un aumento demográfico que contrasta con la incapacidad del hospital para seguir ampliando su cartera de servicios.
La propia Consejería de Salud admite la falta de actualización en la cartera de servicios de este complejo, ya que la última data de 2009. Una situación que obliga a parte de los ciudadanos de la zona de cobertura a desplazarse a Málaga (desde la zona más próxima a Cádiz a más de 1 hora de desplazamiento) para realizar procedimientos que deberían estar disponibles.
Otro reflejo del desfase que presenta esta infraestructura es que es el hospital andaluz que más lejos está de responder a las exigencias marcadas por la Junta para atención sanitaria en la pandemia. Y ello incluye disponer de entre 1,5 y 2 camas de cuidados intensivos y entre 37 y 40 camas para enfermos agudos por cada 10.000 habitantes.
Superficie de ampliación
De acuerdo con los detalles recogidos en los pliegos, el proyecto permitirá ampliar en unos 35.000 metros cuadrados la actual superficie del complejo, que cuenta con 47.000 metros. Y ello mediante la reorganización de los usos de la nueva estructura construida y sin finalizar actualmente.
También incluye la reforma de unos 7.000 metros cuadrados del edificio actualmente en uso, que elevarán su capacidad de atención sanitaria. Al tiempo, se prevé la puesta en servicio para usos administrativos del edificio, también sin finalizar llamado C, en el oeste de la actuación.
Entre las mejoras previstas está la creación de dos unidades especializadas de hospitalización, una de aislamiento y otra de paliativos. Asimismo, el nuevo edificio proyectado albergará prácticamente todas las consultas ambulatorias, estructuradas por especialidades.
También serán ampliadas y reformadas las actuales áreas quirúrgicas, hemodinámica y cirugía ambulatoria; se dispondrá una nueva unidad de rehabilitación, incluyendo gimnasio de adultos, infantil, cardiaco y terapia ocupacional; será reformada el área quirúrgica de nivel 2 para su uso como unidad de endoscopias, y se ampliará el área de urgencias ocupando las zonas actuales de administración.
Otra de las mejoras es que habrá una nueva unidad de cuidados intensivos; la Unidad de Salud Mental dispondrá de hospitalización de agudos y tratamiento de día; se creará un nuevo servicio de medicina nuclear, así como de radioterapia, con los que no cuenta el centro.
La actual sala de diálisis será ampliada, pasando a disponer de 40 puestos. La intervención va a permitir crear un nuevo servicio de dispensación de medicación a los pacientes y de un nuevo servicio de reproducción humana asistida.
El plan de trabajo diseñado fija el arranque de las obras en la ampliación del hospital B y edificio C administrativo. Una vez concluidos los trabajos en las distintas unidades y puestas en servicio, podrá iniciarse la intervención en las zonas liberadas en el edificio actual, el A.