Agentes de la Policía Nacional de Málaga, en una operación conjunta con la Guardia Civil y la NOA de Suecia, en el marco de un equipo de investigación entre España y Suecia, constituido a tal efecto en Eurojust y en Europol, han desarticulado una presunta red de narcotraficantes de origen sueco y polaco que operaba, además de en su país de origen, en diversas naciones europeas.
Principalmente en España, en donde se proveía del estupefaciente que, posteriormente, distribuían en el país nórdico. Así, han sido detenidas 71 personas en ambos países durante un operativo que se ha llevado a cabo mediante cuatro fases, según han informado en un comunicado.
Las investigaciones comenzaron a finales de 2018, con la solicitud, por parte de las autoridades suecas, de diversas Órdenes Europeas de Investigación sobre un grupo que acudía de forma habitual a España para negociar la compra de partidas de estupefaciente.
Estas personas estaban relacionadas con grupos criminales suecos que, en la actualidad, se disputan el control de la distribución de estupefacientes en ciudades como Estocolmo y Gotemburgo, y que en los últimos tiempos han venido causando la muerte de alrededor de 50 personas al año por ajustes de cuentas.
Desde el inicio se comprobó que distintos grupos criminales suecos confluían en España en torno a proveedores comunes de estupefacientes, pudiendo identificar a algunos en las provincias de Málaga y Barcelona.
Una vez comprobadas las vinculaciones, se estableció en Europol un equipo de investigación operativo que incluía a varios de los objetivos más importantes de la investigación, considerados como de alto valor. También la investigación judicial se instruyó en el marco de un equipo conjunto de investigación entre España y Suecia.
Droga oculta entre portes
Desde el inicio de la investigación se identificó a una empresa de mudanzas sueca utilizada para transportar ocultándola entre sus portes legales. La empresa mantenía abiertas dos sedes en España, una de ellas en San Pedro Alcántara, núcleo poblacional del municipio malagueño de Marbella, y otra en la localidad alicantina de Torrevieja.
Así, se identificaron los medios a través de los cuales la droga era transportada y a las personas implicadas. Se intervinieron diversos envíos de droga tanto en España como en Suecia.
Una de estas intervenciones se llevó a cabo en la capital sueca, interceptándose 55.000 unidades de un fármaco opiáceo utilizado como sustituto de la heroína. La intervención de la droga se llevó a cabo una vez que se produjo la entrega a uno de los clientes, procediéndose a la detención.
Unos días más tarde, fueron intervenidos en la ciudad sueca de Gotemburgo otros 85 kilos de cannabis que habían llegado hasta allí escondidos en unos muebles recogidos en el polígono de San Pedro. En el momento de la intervención fueron detenidos dos individuos.
Como consecuencia, se procedió a la detención de los implicados en esta red. También se llevaron a cabo diversos registros domiciliarios. Como resultado de los mismos, en Suecia fueron detenidas dos personas.
En España otros dos individuos, en el interior de una de las naves de San Pedro Alcántara. En concreto, cuando se encontraban preparando 265 kilos de hachís para un próximo transporte, que fueron intervenidos en el momento. En un registro posterior en el domicilio de uno de ellos fueron localizados cuatro kilos de marihuana.
Más tarde se detuvo a una tercera persona. También han sido bloqueados doce inmuebles de los investigados en las provincias de Málaga, Alicante, Ávila y Granada.
Otras fases
En la segunda fase, fue detenido uno de los criminales más violentos por liderar muchos de los ataques armados producidos en la capital sueca. Estaba catalogado por Europol como objetivo de alto valor.
Este individuo, que se encontraba en paradero desconocido, fue localizado en Madrid y detenido por su presunta implicación en delitos de conspiración para el homicidio, tráfico de drogas, secuestro y extorsión. También se arrestaron a otros siete investigados.
Paralelamente, se detectó que la organización se dedicaba a la introducción de las diferentes sustancias estupefacientes en España mediante un método que consistía en traer la droga desde Marruecos suspendida bajo el casco de embarcaciones recreativas.
Posteriormente, fondeaban el hachís en puntos establecidos cerca de la costa para que otras personas lo extrajeran, utilizando tablas de surf modificadas con ganchos y soportes que conectaban con motores de propulsión subacuáticos, aprehendiéndose 25 fardos de hachís flotando tras ser fondeados, arrojando un peso de unos 550 kilos.
Una vez en España, esta droga era enviada a países europeos oculta en el interior de diversos objetos a través de empresas de paquetería u oculta entre mercancía legal en camiones de gran tonelaje, interviniéndose 310 kilos de hachís.
Durante la investigación se han interceptado varios envíos de dinero. Las divisas incautadas eran transportadas en dobles fondos realizados al efecto en equipajes de mano, así como en vehículos utilizados por la organización.
Los líderes de la organización criminal no ocultaban su alto nivel de vida. Uno de ellos poseía obras de arte e, incluso, una enorme cantidad de exclusivas botellas de vino. La investigación se ha desarrollado en varias fases en las que se han realizado 30 registros, procediéndose a la detención de 47 personas y ejecutándose dos Ordenes Europeas de Detención y Entrega.
En uno de los registros, los agentes hallaron, entre otros, un subfusil de guerra Kalashnikov AK-47 y una granada de fracturación M52, lo que afianza la parte de la investigación desarrollada en este sentido, pudiéndose acreditar que esta organización ejercía la violencia frente a otros clanes rivales y que producían hechos violentos en suelo español y sueco, destacando las 50 muertes violentas en los últimos años en Suecia motivadas por hechos relacionados con el narcotráfico.
Esta fase ha finalizado con la incautación de casi una tonelada de hachís, 500 kilos de marihuana, 23 kilos de anfetamina y 5 kilos de cocaína. Además, han intervenido armas de fuego, 18 turismos, dos camiones, siete motocicletas, tres embarcaciones, 439.000 euros en distintas divisas y material informático, así como material para el fondeo de la droga y para su transporte.
También se ha procedido al bloqueo y embargo preventivo de inmuebles, vehículos y cuentas bancarias por valor de más de 14 millones, y a la incautación de numerosas obras de arte que superaban en la tasación inicial el millón de euros.
En el marco de esta investigación, también se investigó de forma paralela la manera en que estas organizaciones blanqueaban el dinero. Se detectó que este tipo de estructuras criminales actuaban como verdaderas mafias en la provincia de Málaga.
Se evidenció la canalización de fondos de procedencia ilícita a través inversiones en inmuebles de lujo en Marbella y en otros municipios de la zona. Asimismo, se autorizó judicialmente registros en varias inmobiliarias, dos de ellas en Marbella y gestionadas por ciudadanos suecos. Además, localizaron y bloquearon 64 inmuebles de lujo y terrenos.
También se simultanearon hasta 15 registros, embargándose 23 vehículos e incautándose dinero en efectivo, en cuentas, así como bitcoins y máquinas de contar dinero. El total de activos y bienes recuperados superaría los 55 millones.
A través de diferentes operaciones de blanqueo reconstruidas, se ha acreditado que el entramado bancarizaba en el extranjero este dinero y efectuaba transportes de oro, abriendo cuentas a nombre de sociedades extranjeras a través de las que adquirían bienes de lujo o concedían préstamos a las empresas radicadas en España. En esta fase han sido detenidas en España 9 personas, emitiéndose una Orden Internacional de Detención contra un fugado, arrestado en Brasil.